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Ver sin microscopio en lo infinito, quitar capa a capa hasta que el núcleo que evidencia el arribo de la energía sobre la materia aflora. Bucear, andar, escalar por las elevaciones que se pierden en las imaginarias nubes, desde ahí, confirmar que necesitamos de referentes físicos para transmitir que estamos en lo inefable.
Agarrarla, además, con la mano recuerdo que constituía aproximadamente la excelsitud. Supe de excelsitudes sin incluir manos, cómo no. Eso mucho antes. Y atado.
Como peregrino aprovechando la complacencia y el cariño afectuoso de los mienbros de la redacción del prestigioso Diario de España, SIGLO XXI, en busca de exponer los frutos otoñales, escribi los articulos que hoy armonizan e integran el presente libro.Que no es un libro de ilusiones y ensueños, sino que tienen el propósito que provoquen reflexiones y meditaciones.
Corriente de agua continua y más o menos caudalosa que va a desembocar en otra, en un lago o en el mar, turbia por haberse levantado el sedimento del fondo...
Lo que voy a decir no se apoya -no lo pretende, además lo rechaza- en ningún argumento científico. Rechazo en general lo científico porque proviene, tal caudal de conocimiento, de la mente humana matemática, fajada y limitada, sobre todo no mente libre sino observante desde muchos filtros atascados de prejuicios.
Sueños punitorios en los que he caído miserablemente, sueños punitorios que eyaculo con un ligero emberretinamiento puntual como las fragancias rabiosas; sueños punitorios en los que declamo envaselinados parágrafos de ridiculez.
Yiyi es mi paz, en las noches de frío, calienta mis pies.
Plebeyo, picoroso sentimental y distante, operado que fui de nimiedades, no siempre padecí satiriasis escarlatina supositorios en los años cincuenta rencor y envanecimiento, celos retrospectivos, canas verdes, me aflijo me entontezco.
Dónde quedan las vísceras/ si la noche sombría en las redes/ con la letra se ensaña/ usted, mande y responda/. Esto de convivir no es fácil/aunque lo ponen en duda/ necios, inocentes, deslucidos y locos/.
Entreacto de palabras no sufro ni algo así la triquiñuela del último aliento la viejuca la imprescindible triquiñuela (Soy un hombre de contradicciones muy firmes).
Entre los siglos VIII y VII a. C., Hesíodo, gran poeta de la Antigua Grecia —considerado entre los primeros filósofos griegos— escribió La Teogonía, una obra compuesta por cuarenta manuscritos que integran diversos géneros poéticos preexistentes. En La Teogonía, Hesíodo aborda el origen del cosmos y el árbol genealógico de los dioses griegos.
Después del apogeo fue que nos enfangamos. Muertos, y rematados, ya el uno para el otro bañaditos denotamos un lacónico escepticismo.
El gato Manuel, pasó muchas penitas. Dolor en su ser. Manolito es gato del cielo azul, negro de color.
Con motivo del VII Encuentro Internacional de Poesía Sabersinfin, he tenido días intensos de actividades: de lidiar con las limitaciones propias, de no interrumpir la disciplina adquirida en los tiempos de calma, de confrontar mi ego y el de los demás; pero también, de ratificar que la poesía —la verdadera poesía— cura y sana, y que todos los días son propicios para enfrentarlos desde la vena creativa que todos llevamos dentro.
Sabrás de la garrapata de mis versos o si no no sabrás nada. El suicidio reluce. Las margaritas que arrojaron a tus chanchos mis vacas se las comen.
Yo también he tenido 35 años e incluso, menos. Yo también he lucido mis pectorales en la playa e incluso mis abdominales. Yo también he seducido a Libertad Leblanc e incluso la he complacido Yo también me he frotado contra colegialas en los colectivos e incluso contra profesoras.
Es lógico y natural, que el vigor y la destreza, lo mismo que la belleza desciendan en espiral. Por eso es fundamental, que sepamos aceptar, lo que nos puede pasar a lo largo de la vida, que ocurre en buena medida por nuestra forma de obrar.
Mamá no es como Charlotte Rampling. Aun de jovencita no había sido mamá tan delgada como la otra. Papá no es como Dirk Bogarde. Aunque la otra, delgada y todo, ocupó siempre mucho más espacio en las ensoñaciones de papá.
La distancia entre aquí no ha pasado nada porque aquí no ha pasado todo y aquí ha pasado todo aunque ese algo no ha pasado acaso ¿existe?
Evangelistas: a toda orquesta la enormísima carpa del gracioso Amor Omnímodo. El Recalcitrante Amor acertaba en un tema rápido de Iglesia. El Amor infla los tríceps del físico-culturista participante más esponjado del Torneo Intercontinental de Grandes Patos.
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