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El gato Manuel, pasó muchas penitas. Dolor en su ser. Manolito es gato del cielo azul, negro de color.
Con mar de fondo en el corazón, y ciega por revivir la traición, sin querer de mi hoy nada, más por mí, otra vez más es hoy. Nada pierdo si muero, nada llevo, nada os dejo, no y mil veces noooo. Nada se me pida pues estaré lejos.
Sabrás de la garrapata de mis versos o si no no sabrás nada. El suicidio reluce. Las margaritas que arrojaron a tus chanchos mis vacas se las comen.
El amor es para el alma, un alimento obligado, puro, desinteresado y buena fuente de calma.
Es lógico y natural, que el vigor y la destreza, lo mismo que la belleza desciendan en espiral. Por eso es fundamental, que sepamos aceptar, lo que nos puede pasar a lo largo de la vida, que ocurre en buena medida por nuestra forma de obrar.
Noticias nuevas, sentí tu ausencia, caliente en la selva, porque nací así. Me llaman lamentadora, pena de señoras, no sé si es así…
Mis clases de francés… que yo me sé, no fracasaré en ellas, pues lograré amor. Graduarme, paz por todas partes, buenas aventuras, compañerismo, saber más, aprender...
¡Qué bueno que llegó mayo! con sus almendros en flor los campos con su verdor y el canto del guacamayo.
Desde bebé en nuestra alma, y ahora con diecisiete porcelanas. Gracias por acompañarnos... Siempre, siempre así será.
Cuando pienso Señor en tu grandeza y en tu bondad, profunda y sosegada, mi corazón entona una balada que transforma el furor en sutileza.
Pochita era un nombre especial para mí. El gato de mi padrino lo tenía, "Pocho", pero Pocha resultó pocha, enferma. Toda su vida con tos y con sus patitas un poco paralizadas, se dejaba coger, sólo sus hermosos ojazos verdes, radiantes luceros que dicen "te quiero", nos hacen felices.
Ríos de plata que dan a un mar de oro, ríos de noche en Xucantervhil que cubren los días, ríos de sol rojo y naranja que dan frío y hambre si se tornan pálidos, blancos y se desvisten...
A ti, valeroso y noble, que bajo tierra laboras, piensa que todas las horas pueden causarte un mandoble...
Hoy quiero dedicarme este soneto, porque hasta ahora nadie lo había hecho; mas puede ser, que quede algo maltrecho, si me tachan de altivo o de paleto.
Están siempre dando leña, pretendiendo hacernos daño. ¿Si es parte de nuestra seña, porqué interfieres, extraño?
Desde el 2011, cuando escribí el Poema a la Batalla de Puebla, esta obra se ha consolidado como una de mis composiciones más exitosas. Ha sido ampliamente declamada durante la festividad del 5 de mayo y ha alcanzado un reconocimiento internacional al ser traducida al inglés y al francés.
Doña novedad cavilaba al filo de la media noche. Si tuviese usted corazón, escucharía el galope de una gran imaginación, así el corazón
hablaría ante la idea, aunque los pensamientos tristes intentarían consolar el dolor infame...
¿Para qué Semana Santa?, preguntan los descreídos, ¿y por qué en esa Semana hay un ambiente distinto? Pues yo voy a responderos
con respeto y con cariño, basado en la percepción que tengo desde muy niño.
Como todos los años, tu llegada, hace que reverdezcan los amores, y los campos se vistan de colores con la lluvia de abril tan esperada.
Estamos en días en los que quienes mueven los hilos del imperio del norte han resquebrajado nuestra realidad en gran medida para imponer nuevas condiciones. Transitan frente a nosotros las directrices para lo que será el segundo cuarto de este siglo.
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