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India y China lideran respectivamente en opinión (+90%) las demandas de mayor compromiso y acción conjunta contra el cambio climático. USA le sigue con un 78% y Europa con un 70%. Alok Sharma, presidente de la conferencia COP26, afirma que “las decisiones y acciones que tomemos sobre el cambio climático antes del 2030 marcarán la trayectoria para futuras generaciones”.
El informe ‘Global Hunger Index 2021’ alerta sobre el retroceso para lograr el ‘hambre cero’ en 2030. Entre las principales causas se encuentran los conflictos violentos y prolongados, los efectos adversos del cambio climático y las consecuencias de la pandemia de Covid-19. Al ritmo actual, la comunidad internacional no alcanzará el Objetivo de Desarrollo Sostenible 2 de hambre cero en 2030. De hecho, 47 países no lo conseguirán.
La Ley de Cambio Climático, recientemente aprobada por el Congreso de los Diputados, establece que para 2050, no circularán coches de combustión en el territorio nacional. Para cumplir este objetivo, el Gobierno se ha propuesto llegar a un parque de cinco millones de coches eléctricos para el año 2030, una previsión que, para cumplirse, necesitará que la venta de vehículos eléctricos aumente un 13.500%.
Esa iniciativa forma parte de los compromisos adquiridos por el Gobierno en la Declaración ante la Emergencia Climática y Ambiental en España aprobada por el Consejo de Ministros en 2020. Habrá recomendaciones no vinculantes que recibirán el Gobierno y el Congreso. Los debates girarán en torno a cómo hacer que el país sea más seguro ante el cambio climático.
Los regantes remarcan que con las reservas superficiales de agua es posible generar energía eléctrica en momentos de aumento de la demanda instantánea o fuertes precios, ya que al tratarse de infraestructuras construidas por norma general hace ya muchos años y que han finalizado su periodo de amortización, el coste de producir energía eléctrica es mucho más barato que hacerlo con gas, carbón o fuel.
Portugal, España, Francia y otros 12 países en el sur del continente europeo se encuentran en gran peligro por culpa del cambio climático, específicamente en lo que se refiere a la economía. El Covid-19 nos dio una muestra de lo que significa enfrentarnos a una fuerza de la naturaleza para la cual no estamos preparados.
Un razonable cuidado del entorno lo venimos practicando algunos mucho antes de que colocaran el primer contenedor verde en el barrio. Que urge una desaceleración drástica y urgente en nuestro estilo de vida (¿decrecimiento?) lo sospechamos algunos desde nuestra más tierna adolescencia, cuando todavía no proliferaban los gurús medioambientalistas de «consejos vendo y para mí no tengo».
La desolación en la tierra es grande. Cada día son más las personas que necesitan asistencia y protección humanitaria. Sin embargo, sólo hay que adentrarse por cualquier rincón del planeta y observar, que se acrecienta el desamparo entre análogos, unas veces porque la capacidad de las autoridades locales no es suficiente para hacer frente a la situación, y en otras ocasiones por dejadez de las propias instituciones de ámbito social o nefasta gobernanza.
Grandes incendios forestales están incinerando bosques en el oeste de Estados Unidos y en otras partes del mundo como Turquía, Grecia y Siberia, destruyendo millones de hectáreas, quemando pueblos enteros y cubriendo vastas regiones con columnas de humo que se extienden por miles de kilómetros.
El futurista proyecto de superyate atómico "Earth 300", con base en Singapur, que navegará por el mundo en su lucha contra el cambio climático, será presentado por primera vez en Europa en SUTUS 2021, el encuentro pionero que aúna el turismo espacial y subacuático, que tendrá lugar del 22 al 24 de septiembre en Les Roches Marbella.
Estoy en contra de los agoreros que preconizan que, de seguir así, acabaremos con la Tierra. Estos científicos catastrofistas, no sé si por algún tipo de interés, pues no creo que sea por desconocimiento, llenan de miedo a los humanos a los que hacen que se sientan, sin motivo, culpables de las mutaciones que, a los largo de miles de millones de años, ha experimentado nuestra Tierra.
El catastrófico cambio climático está calentando el planeta. Se han batido récords de temperatura en diversas partes del mundo, desde Siberia hasta California, y una profusión de incendios forestales, sequías y huracanes se extienden por el mundo. Sin embargo, los defensores de la tierra y del agua que luchan para salvar el planeta enfrentan amenazas que van desde la intimidación hasta el encarcelamiento o la muerte.
3, 200 y 419. Estos son los números que ayudan a explicar el actual agravamiento de la crisis climática. El “419” se refiere al nivel de concentración de dióxido de carbono en la atmósfera, medido en partes por millón, según el último informe emitido por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos, cuyas siglas en inglés se pronuncian como el nombre de Noé, el personaje del Antiguo Testamento que predijo una catástrofe climática y fue ignorado hasta que era muy tarde.
Han pasado cinco años desde que se firmó el Acuerdo de París sobre Cambio Climático. Este acuerdo, firmado por la mayoría de los países del mundo, estableció un plan totalmente voluntario e inexigible para evitar el caos climático global.
La Confederación Española de Asociaciones de Fabricantes de Productos de Construcción (CEPCO), y sus asociaciones, junto con otros representantes del sector de la construcción, han mostrado su disconformidad con algunos aspectos del texto final de la Ley de Cambio Climático y Transición Energética, que regresa al Congreso de los Diputados, tras su modificación en el Senado.
“La Cumbre del Clima convocada por Joe Biden para el 22 de abril supone una oportunidad de oro para que España, representada por Pedro Sánchez, lidere el cambio hacia un sistema alimentario más basado en plantas, un paso imprescindible y crucial en la lucha contra la emergencia climática”.
Vivimos sin lugar a dudas uno de los momentos más importantes en la historia de la humanidad, de nuevo un agente catalizador ,en este caso en forma de pandemia, ha impulsado una aceleración extraordinaria, exponencial y veloz que nos dejará profundos cambios en la economía, la política, la geoestratégica, las relaciones humanas y sociales. La historia, nos ha situado así, de esta forma como espectadores , voluntarios o no, de un nuevo momento transcendental y revolucionario.
Poco después de que se restableciera la energía eléctrica, Democracy Now! entrevistó al profesor Robert Bullard, conocido como el “padre de la justicia ambiental”, que comentó: “Ahora somos la estrella solitaria en soledad. El impacto de esta tormenta es mucho mayor que simples cortes de energía e inconvenientes para aquellos sectores que históricamente se han visto afectados por la inseguridad energética y la pobreza energética”.
En la orden judicial, el juez David Tatel cita las palabras de Dave Archambault II, expresidente de la tribu sioux de Standing Rock: “El agua es más que un recurso, es sagrada, ya que el agua conecta toda la naturaleza y sostiene la vida”, escribió Archambault al Cuerpo de Ingenieros del Ejército en marzo de 2016, un mes antes de que se encendiera la primera fogata de protesta contra el Dakota Access, cerca de la ruta por donde estaba planeada la construcción del oleoducto, ubicada en la confluencia de los ríos Cannonball y Misuri, en territorios tribales no cedidos.
Los últimos siete años han sido los más cálidos de los que se tiene registro. El empeoramiento de la crisis del cambio climático provocó olas de calor y récords de incendios, sequías devastadoras y la temporada más activa de huracanes en el Atlántico registrada hasta el momento
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