Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | Pedro Sánchez | Populismo | Crítica | PSOE

El puto amo

Me baso, naturalmente, en sus propias manifestaciones de corte tan populista, como las de Maduro, López Obrador y compañía
Gabriel Muñoz Cascos
miércoles, 1 de mayo de 2024, 14:32 h (CET)

Llegó el lunes 29 de abril de 2024. Y, como “todo pasa y todo queda”, pasaron los cinco días de la ignominia sanchista y nos quedó Sánchez al desnudo, el Puto Amo (Puente dixit), pero más cateto y dictador que nunca. Me baso, naturalmente, en sus propias manifestaciones de corte tan populista, como las de Maduro, López Obrador y compañía. Pero hoy solo quiero fijarme en lo que este plagiador debe representar para sus conmilitones. Tomo para ello la expresión que me sirve de título: “El Puto Amo”. Que al no haber sido cuestionada por Sánchez ni por ninguno de sus ministros, debe ser “moneda corriente” en el lenguaje coloquial entre ellos. Si es así, permítaseme que haga algunas consideraciones al respecto. A mi juicio decir “soy el amo” puede entenderse como chulería y prepotencia; por eso se suele decir soy el propietario o dueño que tienen connotaciones más amables. Pero si alguien dice que es “El Puto amo” queda bien claro que, además de un grosero, quiere transmitir una autoridad exorbitante. Pero si el que habla es un tercero que llama al superior “El Puto Amo” parece muy clara su sumisión incondicional y obediencia infinitas. Negro panorama tenemos. Renuncio a elucubrar sobre “La Puta Ama”. No estoy preparado para ello.

Noticias relacionadas

Suecia ha sido históricamente un ejemplo de bienestar social con una red de protección estatal admirada globalmente. Esta solidez ha contribuido a niveles de vida envidiables, y a una confianza ciudadana notable en sus instituciones. Sin embargo, en los últimos años, esta misma estructura ha empezado a mostrar fisuras.

Vivimos un tiempo en el que la inteligencia artificial (IA) avanza a un ritmo vertiginoso. Cada nueva versión sorprende por su capacidad de procesar datos, imitar el lenguaje e incluso acercarse a formas de expresión que parecían, hasta hace poco, exclusivamente humanas. Sin embargo, la cuestión de fondo no es tanto preguntarnos hasta dónde llegará la IA, sino dónde quedamos nosotros como seres humanos.

La mente guarda algunos recuerdos como si fueran heridas sin cicatrizar. A veces vuelven, una y otra vez, con la fuerza de lo que creemos no haber resuelto: la culpa, el dolor, los reproches. Y sentimos que seguimos viviendo ese momento, y nos quedamos anclados en un pasado que ya no existe. Pero un recuerdo no es más que eso: un pensamiento que aparece en la mente. No es realidad, porque no está ocurriendo aquí y ahora.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto