El Betis Baloncesto ha sumado esta tarde una nueva derrota en la Liga ACB, esta vez al perder en casa en la prenavidad ante el Rio Breogan en un partido en el que, una vez más, Shannon Evans (30 puntos, 8 asistencias y 28 de valoración) ha hecho todo lo posible por llevar a su equipo a la victoria, pero en el que los errores puntuales de sus compañeros y la habitual debilidad defensiva de los de Casimiro propician que los verdiblancos se vayan al mini parón con solo dos triunfos.

Por su parte el Rio Breogan suma su sexta victoria por otras tantas derrotas y siguen soñando con estar en Badalona en la próxima edición de la Copa del Rey. El equipo de Veljko Mrsic supo jugar con más serenidad y acierto los instantes finales, y también con un poco más de suerte para llevarse a Lugo una victoria que estaba escrita que no se podía quedar en el sur.

Porque si fallas hasta cuatro tiros libres cuando la bola más quema es muy complicado que ganes y salgas de ahí abajo; porque cuando un teórico tirador contrastado como Bertans hace un "airball" desde la frontal con un triple para poner por delante a tu equipo a pocos segundos del final lo es aún más difícil. 

Y cuando además tienes la suerte de que el mejor lanzador del rival, en este caso Bamforth, falle dos tiros libres pero no cierras el rebote la victoria -y salir del infierno clasificatorio- sencillamente es imposible. Da igual que Evans de nuevo se ponga en modo "Teen Wolf"; da igual que lo tengas en la punta de las manos. Si el resto no responde en los momentos de máxima tensión... malo. Muy malo.

Buen comienzo... sin continuidad

El Betis comenzó fuerte, como suele hacer en muchos partidos en casa. Kurucs, muy acertado en el primer cuarto anotando sus tres triples (luego no aportó punto alguno más), BJ Johnson y Gerun pusieron el 7-0 de inicio, contrarrestado, no obstante, en menos de un minuto por los lucenses con su arma predilecta, el triple. Uno de Momirov y otro de Bamforth, más una canasta anterior de Happ, colocaron el 7-8.

La igualdad se mantuvo hasta los instantes finales del primer parcial, en el que el Breogan comenzó a tomar la delantera. Primero un triple de Momirov; y luego gracias a una antideportiva cometida en ataque por Kurucs sobre Nakic, que faltó el canto de un duro para que fuese descalificante.

Aquella fue la primera decisión, esta vez con acierto, que tomaron los tres colegiados quienes, desde entonces, comenzaron el habitual concierto de pito contra los de verdiblanco que suelen ofrecer los tríos arbitrales que acuden a San Pablo. Y esta vez, además, dirigidos y capitaneados por un sospechoso habitual de estas tierras desde los tiempos del CB Sevilla como lo es Juan Carlos García González. Así Breogán lo tuvo un poquito más fácil.

Báez se fastidia la rodilla

El segundo cuarto comenzó con la lesión de Báez, quien se tuvo que retirar aquejado posiblemente de su rodilla, otra vez, en una acción fortuita. Pinta mal la lesión de un jugador que no tiene suerte con su rodilla derecha desde que se la fastidiara por primer avez en la pretemporada, durante la Copa Andalucía.

En el Betis fue Shannon Evans quien comenzó a tomar el mando de las operaciones en ataque, con acciones inverosímiles ante la casi nula aportación ofensiva del resto de exteriores. Más coral, aunque sin ningún alarde y sin despegarse en ningún momento de los béticos, el Breogan llegó a tener siete puntos de renta (30-37) antes de una última reacción final del equipo de Casimiro.

Al descanso se llegó con 37-39 pero con el hándicap para el Betis de una técnica señalada a BJ Johnson III por García González, después de que el jugador norteamericano protestara, en la retirada a los vestuarios, una posible falta sufrida en la última acción de la primera parte, y obviada por los colegiados. 

Bamforth, no obstante, no aprovechó el correspondiente tiro libre a la vuelta de vestuarios y el choque se reanudó tal y como finalizó en el segundo cuarto. Momento en el que Bertans tuvo su punto de inspiración, anotando dos triples casi seguidos que le dieron la primera ventaja en mucho tiempo al Betis (50-49), la última en todo el partido.

Ventaja que le duró muy poco a los de Casimiro porque acto seguido Momirov, la máxima pesadilla lucense con 19 puntos y cinco triples, volvió a poner por delante al Breogan con otro lanzamiento exterior. Y, más tarde, un nuevo triple suyo además de otro de García daban a los gallegos una renta de siete puntos (55-62, min 28).

Evans contra todos...

El último cuarto comenzó con el Breogan seis arriba, con Evans descansando y con Pozas al mando de las operaciones en el Betis. Y también con Tsalmpouris haciendo lo que mejor sabe: tirar de tres. El atípico pívot griego anotó dos triples para empatar el partido a 66 a 7:28 del final; además de otras dos canastas que dejaban a su equipo a uno (70-71), después de que Happ y Bamforth volvieran a mini estirar el marcador.

Esos fueron sus diez puntos, pero luego daría la de arena errando dos tiros libres importantes, después de otro tiro desde la personal errado por Hill. El escolta bético había forzado una canasta más antideportiva de Happ, una rara avis arbitral a favor del Betis; pero falló su tiro libre y, después, en otra falta un tanto dudosa señalada por los árbitros, erró Tsalmpouris, con el marcador en 72-73.

Faltaba medio cuarto, y de ahí al final, con Evans de nuevo en cancha, el partido se convirtió en un duelo ofensivo entre el base del Betis y todo el equipo lucense. Y a punto estuvo Evans de salir ganador, gracias a sus acciones increíbles.

...hasta contra los suyos

Pero en el otro lado estaban Happ, otra pesadilla en este caso en el juego interior frente a unos inefectivos Gerun y Kurucs; y Bamforth; y también Momirov. El escolta respondió al 2+1 de Evans con un triple (81-84), que tuvo en la siguiente acción la contra respuesta del americano (84-84, a menos de un minuto).

Entre medias Bertans había errado otro tiro libre fruto de una dudosa técnica señalada contra Bamforh, que le habría dado la delantera al Betis. Y el propio Bertans, con el Betis uno abajo después de que Lukovic anotase solo uno de dos tiros libres (84-85), hizo el ya comentado "airball" a 25 segundos con un triple desde la frontal que no tocó aro.

Para rematar, Bamforth, recortando quizá sus exitosos tiempos en el CB Sevilla, le dio una vida extra al Betis errando, cosa absolutamente anormal en él, dos tiros libres en la siguiente acción, pero Nakic capturó, con algo de suerte, un rebote mal cerrado y ahí finalizaron las esperanzas del Betis.

El propio Nakic anotó los tiros de la personal que sufrió, Evans falló muy forzado y Hollatz sentenció desde la personal para continuar con el sueño del Breogan... y con la pesadilla antes de Navidad del Betis.

84- BETIS BALONCESTO: Evans (30), Bertans (11), Johnson (5), Kurucs (9), Gerun (8) -cinco inicial-, Cvetkovic (3), Hill (2), Almazán (2), Tsalmpouris (10), Báez (1), Sylla (3) y Pozas (-).

89- RIO BREOGAN: Hollatz (11), Bamforth (12), Momirov (19), Happ (14), Nakic (3) -cinco inicial-, García (10), Lukovic (2), Nenadic (-), Brajkovic (2), Sergi Quintela (8) y Arteaga (8).

PARCIALES: 22-25, 15-14, 23-25 y 24-25.

ÁRBITROS: García González, Bultó y Sánchez. Arbitraje bastante polémico, aunque sin eliminados por personales.

INCIDENCIAS: Duodécima jornada de la liga ACB. Pabellón San Pablo (Sevilla). 4.576 espectadores, con buena representación de la afición del Rio Breogan.