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Doblete del delantero colombiano
Atlético-Athletic: El Tigre se cena unos leones (2-1)
Daniel Sanabria |
miércoles, 21 de marzo de 2012, 21:40
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2-Atlético de Madrid: Courtois (2); Juanfran (2), Miranda (1), Godín (2), Filipe Luis (1); Gabi (2), Mario Suárez (1), Koke (1); Turan (2), Falcao (2), Adrián (3).
1-Athletic de Bilbao: Iraizoz (2); Iturraspe (1), Javi Martínez (3), Amorebieta (1), Aurtenetxe (1); Íñigo Pérez (1), Ander Herrera (1), Susaeta (2), Muniain (1); De Marcos (2), Toquero (0).Dos de los favoritos a ganar la presente Europa League se enfrentaban en el Vicente Calderón con el objetivo de escalar posiciones y repetir experiencia europea el año próximo. Aunque durante los primeros cuarenta y cinco minutos se vieron dos equipos excesivamente fatigados y faltos de carácter, algo sorprendente si tenemos en cuenta los inquilinos de ambos banquillos.
Fue al reanudarse el segundo tiempo cuando el Atleti supo leer el partido y exprimir al máximo los minutos que aún restaban por delante. El acierto goleador de Falcao fue el detonante para romper un partido tosco y demasiado enquistado en el centro del campo. Todo llegó, como casi siempre, tras una buena jugada de Adrián, que disparó desde lejos y cuyo rebote aprovechó el delantero colombiano para marcar a placer.
Habían pasado solo cuatro minutos tras el descanso y el Atleti ya había generado más peligro que en toda la primera parte. La estampida colchonera en la reanudación pudo haber hecho más sangre en la zaga bilbaína, ya que a renglón seguido Turan cedía de nuevo para que Falcao rematara solo ante Iraizoz, aunque el ariete rojiblanco no llegó a conectar con el balón por centímetros. Koke también la tuvo desde fuera del área con un disparo que se marchó desviado.
Demasiados viajes estaba dándose el cántaro a la fuente, y como manda el refranero español, al final se rompió. De nuevo de las botas de Adrián (puro talento) nacía una jugada en la que Juanfran se convirtió en el asistente y Falcao en el goleador. El Tigre remató de manera acrobática para cabecear un balón cuya trayectoria apuntaba hacia el lado contrario. Por algo costó 40 millones el colombiano.
Tardía reacción del Athletic
Con el segundo gol el Cholo replegó líneas y dio entrada a Perea y Dominguez. No pudo tomar mejor decisión el argentino viendo el rendimiento que le dio el lateral colombiano en los pocos minutos que estuvo en el campo. Perea se desquitó de sus docenas de fallos acumulados estos años sacando un balón que irremediablemente se iba para dentro. Incluso el Calderón le ovacionó por la jugada.
En el último cuarto del partido el Athletic se vino arriba y trató de poner en aprietos a Courtois, quien había gozado de su partido más plácido como guardameta del Atlético. Casi sobre el pitido final Javi Martínez recortó distancias, pero ya era demasiado tarde. Tercera derrota consecutiva para el equipo vasco, que está acusando en la Liga los esfuerzos de la Copa del Rey y de la Europa League.
Con distinto sabor de boca se marchó el Atlético, que sin hacer un partido brillante tumbó a un rival directo en la lucha por los puestos europeos. Los tres puntos logrados habrían tenido más lustre de pinchar el Levante, dueño momentáneo de la tan codiciada cuarta posición. Quedan diez partidos para el final y el Atleti es capaz de cualquier cosa.
Atlético-Athletic: El Tigre se cena unos leones (2-1) | ||||||
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Dos de los favoritos a ganar la presente Europa League se enfrentaban en el Vicente Calderón con el objetivo de escalar posiciones y repetir experiencia europea el año próximo. Aunque durante los primeros cuarenta y cinco minutos se vieron dos equipos excesivamente fatigados y faltos de carácter, algo sorprendente si tenemos en cuenta los inquilinos de ambos banquillos. Fue al reanudarse el segundo tiempo cuando el Atleti supo leer el partido y exprimir al máximo los minutos que aún restaban por delante. El acierto goleador de Falcao fue el detonante para romper un partido tosco y demasiado enquistado en el centro del campo. Todo llegó, como casi siempre, tras una buena jugada de Adrián, que disparó desde lejos y cuyo rebote aprovechó el delantero colombiano para marcar a placer.
Habían pasado solo cuatro minutos tras el descanso y el Atleti ya había generado más peligro que en toda la primera parte. La estampida colchonera en la reanudación pudo haber hecho más sangre en la zaga bilbaína, ya que a renglón seguido Turan cedía de nuevo para que Falcao rematara solo ante Iraizoz, aunque el ariete rojiblanco no llegó a conectar con el balón por centímetros. Koke también la tuvo desde fuera del área con un disparo que se marchó desviado.
Demasiados viajes estaba dándose el cántaro a la fuente, y como manda el refranero español, al final se rompió. De nuevo de las botas de Adrián (puro talento) nacía una jugada en la que Juanfran se convirtió en el asistente y Falcao en el goleador. El Tigre remató de manera acrobática para cabecear un balón cuya trayectoria apuntaba hacia el lado contrario. Por algo costó 40 millones el colombiano. Tardía reacción del Athletic
Con el segundo gol el Cholo replegó líneas y dio entrada a Perea y Dominguez. No pudo tomar mejor decisión el argentino viendo el rendimiento que le dio el lateral colombiano en los pocos minutos que estuvo en el campo. Perea se desquitó de sus docenas de fallos acumulados estos años sacando un balón que irremediablemente se iba para dentro. Incluso el Calderón le ovacionó por la jugada.
En el último cuarto del partido el Athletic se vino arriba y trató de poner en aprietos a Courtois, quien había gozado de su partido más plácido como guardameta del Atlético. Casi sobre el pitido final Javi Martínez recortó distancias, pero ya era demasiado tarde. Tercera derrota consecutiva para el equipo vasco, que está acusando en la Liga los esfuerzos de la Copa del Rey y de la Europa League.
Con distinto sabor de boca se marchó el Atlético, que sin hacer un partido brillante tumbó a un rival directo en la lucha por los puestos europeos. Los tres puntos logrados habrían tenido más lustre de pinchar el Levante, dueño momentáneo de la tan codiciada cuarta posición. Quedan diez partidos para el final y el Atleti es capaz de cualquier cosa.
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