El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha emitido una orden ejecutiva para formalizar la retirada del país del Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP, por sus siglas en inglés), tal como ya había advertido que haría durante la campaña electoral.
Trump ha criticado con dureza los tratados de libre comercio y ha prometido revisar las relaciones económicas bajo la premisa de "Estados Unidos primero". Tras estampar la firma en el documento, ha señalado que la ruptura con el TPP --que estaba pendiente de ratificación-- es "algo grande para el trabajador estadounidense".
El portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, ha atribuido esta decisión al interés de Trump por priorizar las negociaciones bilaterales en materia comercial, en detrimento de instrumentos más amplios. De hecho, el propio presidente ha avisado en un encuentro posterior con sindicatos que también revisará el tratado con México y Canadá "en el momento apropiado".
El desplante al TPP ha recibido las críticas de algunos compañeros republicanos como el senador John McCain, que ha calificado la decisión como un "grave error" de "consecuencias duraderas". McCain ha coincidido con el ya expresidente Barack Obama en que supone dejar más espacio para que China amplíe su red comercial.