Con los nombramientos anunciados por Donald Trump parece que no hay buena esperanza en economía, al menos no para Europa, con la elección como Secretario del Tesoro de un partidario de subir aranceles, en línea con el futuro responsable de Agricultura, visto con suspicacia desde España. Todo ello palidece al lado de un antivacunas, Robert Kennedy, al frente de sanidad, o de los provocativos nombramientos en Defensa e Inteligencia, clara señal de que vienen años tumultuosos en los que cualquier sorpresa es posible.
|