El Manchester City superó (0-2) a su vecino el United este miércoles para acceder a la final de la Copa de la Liga, donde se medirá con el Tottenham, gracias a los goles de Stones y Fernandinho en la semifinal jugada en Old Trafford.
Los de Pep Guardiola jugarán su cuarta final seguida, en busca de otros tantos títulos seguidos, gracias al balón parado. El City supo generar peligro como acostumbra, con posesión y juego vertical, pero esta vez lo que le funcionó fue la estrategia en el segundo tiempo.
En una falta en el inicio, Stones encontró el balón en área pequeña para empujarlo a la red y, en un saque de esquina ya en el 82', Fernandinho cazó el balón en la frontal para sellar el pase del City en la final que se jugará el 25 de abril, retrasada del mes de febrero para buscar una mejor situación con la pandemia de coronavirus que permita la entrada de público a Wembley.
Guardiola se verá las caras con un viejo conocido como José Mourinho, entrenador de un Tottenham que el martes sacó su billete a la final tras derrotar (2-0) al Brentford.
