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El 79 por ciento sigue una alimentación saludable de estilo mediterráneo, frente al 68 por ciento en el caso de quienes tienen entre 55 y 64 años, y solo el 13 por ciento lo hace todos los días

Sólo el 20% de las personas de entre 60 y 70 años ha sobrellevado mal el confinamiento

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Sólo el 20 por ciento de las personas de entre 60 y 70 años, los denominados 'jubillennials', ha sobrellevado mal el confinamiento, según se desprende del estudio 'Covid-19 y jubillennials: Impacto en los hábitos de vida saludable de la población española', realizado por Vivaz, la marca de seguros de Salud de Línea Directa Aseguradora.

El trabajo ha consistido en una encuesta realizada a 3.400 personas, del 8 al 13 de mayo de 2020 en pleno confinamiento. El objetivo ha sido evaluar el impacto del Covid-19 en la percepción de la salud de la población española y compararla con los resultados de la misma encuesta que se realizó en junio de 2019, centrándose particularmente en los 'jubillennials', ya que ha sido uno de los grupos que se han visto en mayor riesgo durante esta pandemia.

En este sentido, el 64 por ciento de los españoles de 60 y 70 años no se ha sentido deprimido ningún día en lo que va de año, porcentaje que baja hasta el 53 por ciento entre los españoles de 50 años y al 48 por ciento entre los de 40. Por si este último dato no fuera preocupante, un 14 por ciento de los cuarentañeros admite estar decaído o desanimado la mayoría de los días.

Asimismo, el Covid-19 ha tenido "gran impacto social", puesto que el 17 por ciento de la población del país conoce en su entorno familiar o de amigos a algún fallecido por la enfermedad, lo que supone un "elevadísimo" porcentaje considerando que se ha producido en poco más de 2 meses.

A nivel de asistencia médica, solo el 0,5 por ciento de los ciudadanos ha requerido ingreso hospitalario, pero entre un 6 por ciento y un 12 por ciento ha contactado y recibido asistencia de su médico por teléfono u 'on line', lo que evidencia el desarrollo en el seguimiento a distancia de los pacientes por parte de los profesionales sanitarios y supone avanzar en la telemedicina.

Los más jóvenes empezaron el encierro por el coronavirus con gran fortaleza, como quedó patente en las primeras semanas de cuarentena con la avalancha de vídeos de padres e hijos disfrazándose y organizando juegos y actividades en casa y las canciones desde balcones y ventanas.

Sin embargo, esa situación también ha acabado siendo más llevadera para nuestros mayores desde el punto de vista del estado físico y la motivación. El 52 por ciento de las personas de en torno a 60 y 70 años no ha tenido sensación de cansancio o falta de energía ni un solo día, frente al 33 por ciento en el caso de los españoles próximos a los 40 y 50 años.

Lo mismo sucede con el interés por hacer cosas durante el confinamiento, dado que el 66 por ciento de los 'jubillennials' ha mantenido esa motivación, por encima del 48 por ciento de las personas de la Generación X. Sólo los más mayores han perdido cierta motivación.

Estos resultados se explican, por un lado, por el hecho de que España es el segundo país con mayor esperanza de vida del mundo, solo por detrás de Japón, y cuenta con un sistema público de salud, una dieta y una calidad de vida en cuanto a ocio y clima que hacen "mejor" la vida a los jubilados.

Por otro, buena parte de los ciudadanos de entre 35 y 55 años de edad han tenido que afrontar durante los más de dos meses de confinamiento un sobreesfuerzo de conciliación familiar y laboral debido al cuidado de los hijos menores y la atención de las labores del hogar al tiempo que teletrabajaban, cuando no sufren de estrés por la pérdida de su empleo o un ERTE, entre otras circunstancias.

En este sentido, aunque las generaciones más jóvenes siguen siendo más irritables, el confinamiento ha elevado un 35 por ciento el nivel de intranquilidad o ansiedad entre los 'jubillennials' respecto al año 2019.

Lo que la pandemia no ha cambiado respecto al año anterior es la percepción positiva que la población española de 35 a 75 años tiene de su salud, que se ha mantenido estable. A pesar del coronavirus, el 30 por ciento sigue considerando su salud buena y el 60 por ciento, muy buena, mientras que menos de un 13 por ciento la considera mala o muy mala.

Además se ha notado un relativo deterioro en la población de 70 años, puesto que, según los resultados obtenidos en el trabajo, el 54 por ciento considera ahora que su salud es muy buena, frente al 60 por ciento del 2019.

Por comunidades autónomas, La Rioja (65%), Castilla-La Mancha (64%) y Comunidad de Madrid (63%) son las regiones en las que la percepción subjetiva de la salud es mejor. El Principado de Asturias (53%) Islas Baleares (53%) y Galicia (48%) son las comunidades en las que la percepción de la salud es peor.

Los 'jubillennials' españoles también descansan mejor, ya que el 42 por ciento de ellos dice haber dormido bien o muy bien durante el último mes, frente al 31 por ciento de quienes tienen entre 35 y 54 años. Eso sí, el Covid-19 ha quitado el sueño a los españoles que están al borde de la jubilación, en torno a los 60 años, puesto que el 24 por ciento (un 71% más que en 2019) dice ahora dormir bastante mal, mal o muy mal.

La emergencia sanitaria no ha impedido tampoco que los españoles mantengan en general los hábitos saludables que ya venían siguiendo. Y de nuevo aquí se repite una máxima: a más edad, mejores hábitos. Y es que, el 57 por ciento de los jubilados hace deporte al menos tres veces por semana, dos puntos porcentuales más que en 2019 y por encima de la población de entre 55 y 65 años (52%).

Asimismo, el 79 por ciento sigue una alimentación saludable de estilo mediterráneo, frente al 68 por ciento en el caso de quienes tienen entre 55 y 64 años, y solo el 13 por ciento lo hace todos los días. En lo que sí ha pasado factura el Covid-19 a los jubilados más que a los trabajadores en activo es en su vida social, dado que si el año pasado el 57 por ciento declaraba tener una vida social activa, ahora es el 53 por ciento quien lo manifiestan.

"Estos datos desmontan el mito de que con la edad nos volvemos más cascarrabias, ya que, en general, el estado de ánimo y la paciencia presentan valores más positivos a medida que envejecemos. Y, en general también, nos preocupamos más por llevar una vida saludable. Algo que diría se ha mantenido e incluso intensificado durante estos meses de confinamiento por el Covid-19", ha dicho el catedrático de la Facultad de Medicina de Granada, presidente científico de la Sociedad Española de Medicina Antienvejecimiento y Longevidad, y asesor médico de Vivaz Seguros de Salud, Manuel Castillo.

Sólo el 20% de las personas de entre 60 y 70 años ha sobrellevado mal el confinamiento

El 79 por ciento sigue una alimentación saludable de estilo mediterráneo, frente al 68 por ciento en el caso de quienes tienen entre 55 y 64 años, y solo el 13 por ciento lo hace todos los días
Redacción
lunes, 15 de junio de 2020, 10:12 h (CET)

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Sólo el 20 por ciento de las personas de entre 60 y 70 años, los denominados 'jubillennials', ha sobrellevado mal el confinamiento, según se desprende del estudio 'Covid-19 y jubillennials: Impacto en los hábitos de vida saludable de la población española', realizado por Vivaz, la marca de seguros de Salud de Línea Directa Aseguradora.

El trabajo ha consistido en una encuesta realizada a 3.400 personas, del 8 al 13 de mayo de 2020 en pleno confinamiento. El objetivo ha sido evaluar el impacto del Covid-19 en la percepción de la salud de la población española y compararla con los resultados de la misma encuesta que se realizó en junio de 2019, centrándose particularmente en los 'jubillennials', ya que ha sido uno de los grupos que se han visto en mayor riesgo durante esta pandemia.

En este sentido, el 64 por ciento de los españoles de 60 y 70 años no se ha sentido deprimido ningún día en lo que va de año, porcentaje que baja hasta el 53 por ciento entre los españoles de 50 años y al 48 por ciento entre los de 40. Por si este último dato no fuera preocupante, un 14 por ciento de los cuarentañeros admite estar decaído o desanimado la mayoría de los días.

Asimismo, el Covid-19 ha tenido "gran impacto social", puesto que el 17 por ciento de la población del país conoce en su entorno familiar o de amigos a algún fallecido por la enfermedad, lo que supone un "elevadísimo" porcentaje considerando que se ha producido en poco más de 2 meses.

A nivel de asistencia médica, solo el 0,5 por ciento de los ciudadanos ha requerido ingreso hospitalario, pero entre un 6 por ciento y un 12 por ciento ha contactado y recibido asistencia de su médico por teléfono u 'on line', lo que evidencia el desarrollo en el seguimiento a distancia de los pacientes por parte de los profesionales sanitarios y supone avanzar en la telemedicina.

Los más jóvenes empezaron el encierro por el coronavirus con gran fortaleza, como quedó patente en las primeras semanas de cuarentena con la avalancha de vídeos de padres e hijos disfrazándose y organizando juegos y actividades en casa y las canciones desde balcones y ventanas.

Sin embargo, esa situación también ha acabado siendo más llevadera para nuestros mayores desde el punto de vista del estado físico y la motivación. El 52 por ciento de las personas de en torno a 60 y 70 años no ha tenido sensación de cansancio o falta de energía ni un solo día, frente al 33 por ciento en el caso de los españoles próximos a los 40 y 50 años.

Lo mismo sucede con el interés por hacer cosas durante el confinamiento, dado que el 66 por ciento de los 'jubillennials' ha mantenido esa motivación, por encima del 48 por ciento de las personas de la Generación X. Sólo los más mayores han perdido cierta motivación.

Estos resultados se explican, por un lado, por el hecho de que España es el segundo país con mayor esperanza de vida del mundo, solo por detrás de Japón, y cuenta con un sistema público de salud, una dieta y una calidad de vida en cuanto a ocio y clima que hacen "mejor" la vida a los jubilados.

Por otro, buena parte de los ciudadanos de entre 35 y 55 años de edad han tenido que afrontar durante los más de dos meses de confinamiento un sobreesfuerzo de conciliación familiar y laboral debido al cuidado de los hijos menores y la atención de las labores del hogar al tiempo que teletrabajaban, cuando no sufren de estrés por la pérdida de su empleo o un ERTE, entre otras circunstancias.

En este sentido, aunque las generaciones más jóvenes siguen siendo más irritables, el confinamiento ha elevado un 35 por ciento el nivel de intranquilidad o ansiedad entre los 'jubillennials' respecto al año 2019.

Lo que la pandemia no ha cambiado respecto al año anterior es la percepción positiva que la población española de 35 a 75 años tiene de su salud, que se ha mantenido estable. A pesar del coronavirus, el 30 por ciento sigue considerando su salud buena y el 60 por ciento, muy buena, mientras que menos de un 13 por ciento la considera mala o muy mala.

Además se ha notado un relativo deterioro en la población de 70 años, puesto que, según los resultados obtenidos en el trabajo, el 54 por ciento considera ahora que su salud es muy buena, frente al 60 por ciento del 2019.

Por comunidades autónomas, La Rioja (65%), Castilla-La Mancha (64%) y Comunidad de Madrid (63%) son las regiones en las que la percepción subjetiva de la salud es mejor. El Principado de Asturias (53%) Islas Baleares (53%) y Galicia (48%) son las comunidades en las que la percepción de la salud es peor.

Los 'jubillennials' españoles también descansan mejor, ya que el 42 por ciento de ellos dice haber dormido bien o muy bien durante el último mes, frente al 31 por ciento de quienes tienen entre 35 y 54 años. Eso sí, el Covid-19 ha quitado el sueño a los españoles que están al borde de la jubilación, en torno a los 60 años, puesto que el 24 por ciento (un 71% más que en 2019) dice ahora dormir bastante mal, mal o muy mal.

La emergencia sanitaria no ha impedido tampoco que los españoles mantengan en general los hábitos saludables que ya venían siguiendo. Y de nuevo aquí se repite una máxima: a más edad, mejores hábitos. Y es que, el 57 por ciento de los jubilados hace deporte al menos tres veces por semana, dos puntos porcentuales más que en 2019 y por encima de la población de entre 55 y 65 años (52%).

Asimismo, el 79 por ciento sigue una alimentación saludable de estilo mediterráneo, frente al 68 por ciento en el caso de quienes tienen entre 55 y 64 años, y solo el 13 por ciento lo hace todos los días. En lo que sí ha pasado factura el Covid-19 a los jubilados más que a los trabajadores en activo es en su vida social, dado que si el año pasado el 57 por ciento declaraba tener una vida social activa, ahora es el 53 por ciento quien lo manifiestan.

"Estos datos desmontan el mito de que con la edad nos volvemos más cascarrabias, ya que, en general, el estado de ánimo y la paciencia presentan valores más positivos a medida que envejecemos. Y, en general también, nos preocupamos más por llevar una vida saludable. Algo que diría se ha mantenido e incluso intensificado durante estos meses de confinamiento por el Covid-19", ha dicho el catedrático de la Facultad de Medicina de Granada, presidente científico de la Sociedad Española de Medicina Antienvejecimiento y Longevidad, y asesor médico de Vivaz Seguros de Salud, Manuel Castillo.

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