Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Psicología y sexualidad
Etiquetas | Vida laboral | Ansiedad | Estrés | Vacaciones
Lo habitual es tardar unos 3 días en pasar de un estado de excitación a uno de descanso

“Ociofobia”: ¿pueden ser las vacaciones un castigo?

|

En la sociedad actual existe una queja ampliamente compartida que alude al poco tiempo de ocio propio y de calidad que debería de poder disfrutar cada persona, un deseo que, en ocasiones, acaba por constituir un castigo. Como explica el Dr. Pedro Adrados, psicólogo clínico del Hospital Vithas Nuestra Señora de América de Madrid, “se trata de personas que ante unas vacaciones o pequeñas escapadas de fin de semana, en lugar de disfrutar, sufren y por ello acaban evitándolas. Es lo que se conoce como ociofobia”.

El efecto reparador del descanso se transforma, así, en temor a la inactividad y miedo a “no hacer nada”, de modo que se genera angustia, que es lo que impide un estado de relajación. “El estrés propio de jornadas diarias agotadoras y exageradamente demandantes genera una adicción a esos estímulos tan intensos y poco saludables, de tal manera que resulta dificultoso cortar ese circuito de excitación constante”, afirma Adrados.

El especialista señala, además, que la sociedad productiva y de consumo en la que vivimos fomenta este modelo de acción, que no distingue entre tiempo laboral y tiempo de ocio o descanso. “Para las personas que se adscriben a este modelo multitarea, uno es más valioso cuantas más cosas haga y más resultados obtenga. Así, pueden pasar de una tarea a otra de forma indefinida, sin permitirse tiempos de descanso”

¿Cómo aprender a desconectar?


Debido a este ritmo de vida, para muchas personas estar sobreocupado está bien visto y “no hacer nada” está devaluado. “Todo lo que resulta valorado por los demás se convierte en objeto de deseo, por ello mucha gente elige vivir así e intenta trasladar al resto esa hiperactividad, que puede desembocar en estrés crónico”.

Este ritmo diario tan frenético puede ocasionar problemas de ansiedad, por ello Adrados recomienda tomar conciencia de la importancia de disfrutar de nuestro ocio y del período de vacaciones.

“La recomendación es bajar nuestras expectativas con respecto a los tiempos de relax para no frustrarse y darse unos días para desconectar. Lo habitual es tardar unos 3 días en pasar de un estado de excitación a uno de descanso”. 

“Ociofobia”: ¿pueden ser las vacaciones un castigo?

Lo habitual es tardar unos 3 días en pasar de un estado de excitación a uno de descanso
Redacción
viernes, 21 de junio de 2019, 11:41 h (CET)

En la sociedad actual existe una queja ampliamente compartida que alude al poco tiempo de ocio propio y de calidad que debería de poder disfrutar cada persona, un deseo que, en ocasiones, acaba por constituir un castigo. Como explica el Dr. Pedro Adrados, psicólogo clínico del Hospital Vithas Nuestra Señora de América de Madrid, “se trata de personas que ante unas vacaciones o pequeñas escapadas de fin de semana, en lugar de disfrutar, sufren y por ello acaban evitándolas. Es lo que se conoce como ociofobia”.

El efecto reparador del descanso se transforma, así, en temor a la inactividad y miedo a “no hacer nada”, de modo que se genera angustia, que es lo que impide un estado de relajación. “El estrés propio de jornadas diarias agotadoras y exageradamente demandantes genera una adicción a esos estímulos tan intensos y poco saludables, de tal manera que resulta dificultoso cortar ese circuito de excitación constante”, afirma Adrados.

El especialista señala, además, que la sociedad productiva y de consumo en la que vivimos fomenta este modelo de acción, que no distingue entre tiempo laboral y tiempo de ocio o descanso. “Para las personas que se adscriben a este modelo multitarea, uno es más valioso cuantas más cosas haga y más resultados obtenga. Así, pueden pasar de una tarea a otra de forma indefinida, sin permitirse tiempos de descanso”

¿Cómo aprender a desconectar?


Debido a este ritmo de vida, para muchas personas estar sobreocupado está bien visto y “no hacer nada” está devaluado. “Todo lo que resulta valorado por los demás se convierte en objeto de deseo, por ello mucha gente elige vivir así e intenta trasladar al resto esa hiperactividad, que puede desembocar en estrés crónico”.

Este ritmo diario tan frenético puede ocasionar problemas de ansiedad, por ello Adrados recomienda tomar conciencia de la importancia de disfrutar de nuestro ocio y del período de vacaciones.

“La recomendación es bajar nuestras expectativas con respecto a los tiempos de relax para no frustrarse y darse unos días para desconectar. Lo habitual es tardar unos 3 días en pasar de un estado de excitación a uno de descanso”. 

Noticias relacionadas

En todas las relaciones sociales que con el tiempo acaban siendo más íntimas, los comienzos suelen ser fáciles porque existe una motivación que hace que eso prospere, que vaya avanzando porque el interés emocional es mutuo por ambas partes. Y esto es aplicable para amistades o parejas. En todas ellas, es imprescindible que haya reciprocidad, que exista una conexión que funcione como la gasolina de un automóvil que propicia que día tras día se mueva y circule.

Muchas personas no saben por qué las tratan de esta o aquella manera. ¿Por qué no son capaces de transmitir la seguridad necesaria para alcanzar sus objetivos? En las relaciones interpersonales podemos identificar una fuerte influencia del lenguaje corporal, independientemente de la vestimenta utilizada, el estatus social y la religión. En definitiva, ¡el cuerpo habla!

La tristeza es una emoción humana común y natural. Todos pasamos por momentos difíciles en la vida, y en esos momentos, tener el apoyo de amigos y seres queridos puede marcar la diferencia. Cuando un amigo está triste, es natural querer ayudar, pero a menudo nos enfrentamos a la dificultad de no encontrar las palabras adecuadas para reconfortarlos.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto