El circuito australiano de Phillip Island ha dado el pistoletazo de salida al Mundial de Superbike y Supersport, del que en SIGLO XXI trataremos de informarles puntualmente en cada una de las 13 rondas que se disputarán hasta el mes de octubre.
Daniel Lázaro / SIGLO XXI
Para este nuevo año serán 24 los pilotos que tomen partida en la máxima categoría e intenten suceder en el trono a Ben Spies, que ha iniciado su andadura en MotoGP con el equipo Monster Yamaha. Todo hace indicar que los favoritos volverán a ser los británicos
James Toseland (Yamaha),
Jonathan Rea (Ten Kate Honda) y
Leon Haslam (Suzuki). Del resto del mundo, solamente apuntan alto los veteranos
Max Biaggi (Aprilia) y
Noriyuki Haga (Ducati), mientras que el nivel de
Chris Vermeulen (Kawasaki) en su regreso tras cuatro años en MotoGP todavía es una incógnita.
El Mundial ha perdido a todos los pilotos españoles que participaban en escuderías privadas (Lavilla, Salom y David Checa), así como a Fonsi Nieto, que será partícipe de la nueva categoría de Moto 2. Así, nuestros únicos representantes serán
Carlos Checa (Althea Ducati) y
Rubén Xaus (BMW). El de Sant Fruitós afronta su tercera temporada consecutiva en SBK, aunque ha abandonado la estructura del Honda Ten Kate para pilotar una Ducati no oficial. Xaus, por su parte, firmará su octava temporada en la máxima categoría, segunda consecutiva con la BMW oficial.
Lascorz, con posibilidades en Supersport
En Supersport, con motos de 600 cc, el barcelonés
Joan Lascorz (Kawasaki) será un serio candidato al título tras finalizar en cuarta posición la temporada pasada. Junto a él, lucharán por el campeonato el turco
Kenan Sofuoglu (Ten Kate Honda) y el actual subcampeón, el irlandés
Eugene Laverty (Parkalgar Honda). El otro español en liza será
David Salom (Triumph), que regresa a la categoría tras su fugaz paso por Superbike.
Lamentablemente, las carreras apenas se podrán seguir por televisión en nuestro país. Solamente Eurosport 2, canal que únicamente emite en algunas plataformas de pago, dará en directo las tres carreras el domingo. Para la apasionante Superpole, la solución pasa por el mundo de Internet.