Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Cine
Etiquetas | Crítica de cine | Películas
El realizador estadounidense no falla a su cita anual con las salas de cine

Bienvenidos al 'Café Society' de Woody Allen

|

Años 30. Bobby Dorfman (Jesse Eisenberg) es un joven neoyorquino que se muda a Los Ángeles con la intención de que su tío Phil Stern (Steve Carell), un poderoso agente de Hollywood, le proporcione trabajo. Allí, conoce a Vonnie (Kirsten Stewart), la guapa secretaria de su tío, de la que no tardará en enamorarse perdidamente.

1409164

La cita de este año con Woody Allen la constituye Café Society, un divertido y, a ratos, delicioso ejercicio de melancolía cinéfila y vital, con el que el veterano autor de Manhattan (1979), tan ingenioso como de costumbre aunque quizá más liviano que en otras ocasiones, reflexiona en torno a temas como el paso del tiempo, la industria del Hollywood dorado o las inextricables intermitencias de ese sentimiento extraño y universal al que llamamos amor.

El propio Allen, que hace las veces de narrador omnisciente, guía al espectador a través de un relato caleidoscópico en el que, si bien el eje central es la historia de amor entre Bobby y Vonnie, también hay tiempo para detenerse con frecuencia en las vidas de los distintos miembros de la familia del protagonista, destacando la subtrama gansteril relativa al hermano mayor (Corey Stoll) o las hilarantes conversaciones de los dos progenitores (Ken Stott y Jeannie Berlin) en torno a la religión judía. El uso del flashback resulta muy recurrente a lo largo de los noventa y seis minutos de metraje, ya sea para aportar información sobre los diferentes personajes o simplemente para ilustrar situaciones previas que habían sido omitidas. Café Society, que supone un ejemplo de concisión narrativa, goza de un ritmo trepidante al que sólo se le puede reprochar cierto abuso en la utilización de la voz en off.

En el apartado visual, nos encontramos con una elegante puesta en escena erigida en determinadas ocasiones a partir de largos planos secuencia muy bien elaborados y ejecutados. La preciosa y crepuscular dirección de fotografía del mítico Vittorio Storaro (Apocalypse Now, Novecento, El último emperador…) hace el resto.

Quizá uno de los puntos más flojos de la película que nos ocupa, al menos en opinión de quien esto escribe, sea su reparto, donde todos cumplen pero en el que ni uno solo sobresale.

Conclusión: Woody Allen mantiene la forma a pesar de sus ochenta años. Su pasión por el cine continúa siendo admirable.

Bienvenidos al 'Café Society' de Woody Allen

El realizador estadounidense no falla a su cita anual con las salas de cine
Ricardo Pérez
miércoles, 14 de septiembre de 2016, 09:02 h (CET)
Años 30. Bobby Dorfman (Jesse Eisenberg) es un joven neoyorquino que se muda a Los Ángeles con la intención de que su tío Phil Stern (Steve Carell), un poderoso agente de Hollywood, le proporcione trabajo. Allí, conoce a Vonnie (Kirsten Stewart), la guapa secretaria de su tío, de la que no tardará en enamorarse perdidamente.

1409164

La cita de este año con Woody Allen la constituye Café Society, un divertido y, a ratos, delicioso ejercicio de melancolía cinéfila y vital, con el que el veterano autor de Manhattan (1979), tan ingenioso como de costumbre aunque quizá más liviano que en otras ocasiones, reflexiona en torno a temas como el paso del tiempo, la industria del Hollywood dorado o las inextricables intermitencias de ese sentimiento extraño y universal al que llamamos amor.

El propio Allen, que hace las veces de narrador omnisciente, guía al espectador a través de un relato caleidoscópico en el que, si bien el eje central es la historia de amor entre Bobby y Vonnie, también hay tiempo para detenerse con frecuencia en las vidas de los distintos miembros de la familia del protagonista, destacando la subtrama gansteril relativa al hermano mayor (Corey Stoll) o las hilarantes conversaciones de los dos progenitores (Ken Stott y Jeannie Berlin) en torno a la religión judía. El uso del flashback resulta muy recurrente a lo largo de los noventa y seis minutos de metraje, ya sea para aportar información sobre los diferentes personajes o simplemente para ilustrar situaciones previas que habían sido omitidas. Café Society, que supone un ejemplo de concisión narrativa, goza de un ritmo trepidante al que sólo se le puede reprochar cierto abuso en la utilización de la voz en off.

En el apartado visual, nos encontramos con una elegante puesta en escena erigida en determinadas ocasiones a partir de largos planos secuencia muy bien elaborados y ejecutados. La preciosa y crepuscular dirección de fotografía del mítico Vittorio Storaro (Apocalypse Now, Novecento, El último emperador…) hace el resto.

Quizá uno de los puntos más flojos de la película que nos ocupa, al menos en opinión de quien esto escribe, sea su reparto, donde todos cumplen pero en el que ni uno solo sobresale.

Conclusión: Woody Allen mantiene la forma a pesar de sus ochenta años. Su pasión por el cine continúa siendo admirable.

Noticias relacionadas

Netflix ha desvelado el tráiler y el póster de Atlas, la nueva película dirigida por Brad Peyton y protagonizada por Jennifer Lopez, que llegará a Netflix el próximo 24 de mayo. Atlas Shepherd (Jennifer Lopez), una brillante pero misántropa analista de datos que desconfía profundamente de la inteligencia artificial, se une a una misión para capturar a un robot rebelde con el que comparte un misterioso pasado.

El primer largometraje escrito y dirigido por Estibaliz Urresola Solaguren, 20.000 especies de abejas, se ha impuesto en las cuatro categorías a las que optaba en la XI edición de los Premios Platino Xcaret: Mejor ópera prima de ficción Iberoamericana, Mejor interpretación femenina de reparto para Ane Gabarain, Mejor guion para Estibaliz Urresola y Premio PLATINO al cine y educación en valores.

Filmin estrena el próximo viernes 26 de abril, en exclusiva en España, el documental "Cinéma Laika", dirigido por el croata afincado en Francia Veljko Vidak. La película recorre el proceso de construcción del Kino Laika, una sala de cine construida en una antigua fábrica en Karkkila, un pueblo finlandés de apenas 9.000 habitantes.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto