La economía española creció un 0,8% en el primer trimestre, una décima más de lo esperado por el Gobierno y el Banco de España, según el avance de datos de la Contabilidad Nacional Trimestral publicado este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Este crecimiento del 0,8% iguala los registrados en los dos trimestres previos (tercer y cuarto trimestre de 2015) y se sitúa dos décimas por debajo del 1% conseguido entre abril y junio de 2015, hasta ahora el ritmo trimestral de avance más elevado desde que la economía española inició la recuperación.

La tasa interanual del PIB, por su parte, se situó en el 3,4% en el primer trimestre del año, una décima menos que en el trimestre anterior.

Con el repunte trimestral del PIB entre enero y marzo se encadenan ya once trimestres de avances, mientras que la tasa interanual acumula nueve trimestres en positivo, con crecimientos superiores al 3% en los últimos cuatro trimestres.

Los datos avanzados este viernes por el INE son provisionales y se conocerán a nivel desagregado el próximo 26 de mayo.

El dato trimestral del PIB adelantado por Estadística para el primer trimestre supera en una décima el estimado por el Banco de España (0,7%) y que el Gobierno había dado por bueno.

En su boletín del mes de marzo, la institución que gobierna Luis María Linde apuntaba a una desaceleración "gradual y progresiva" de la economía española en los próximos meses. Sus previsiones pasan por que el PIB crezca un 0,6% en el segundo y en el tercer trimestre de este año y un 0,5% en el último.

El Banco de España ha rebajado una décima su previsión de crecimiento del PIB para 2016, hasta el 2,7%, por la revisión a la baja del crecimiento mundial, la apreciación del euro y el descenso de las cotizaciones bursátiles. Para 2017, estima un incremento del 2,3%, una décima menos de lo proyectado por el Gobierno en el Programa de Estabilidad.

BANCO DE ESPAÑA: EL CONSUMO PRIVADO, ALGO MENOS DINÁMICO.
En su último boletín económico, publicado esta semana, el Banco de España señalaba que en el primer trimestre del año se habría producido una "modesta ralentización" de la actividad de los principales sectores económicos.

La institución que gobierna Luis María Linde afirmaba que en el primer trimestre del año se mantuvo el "comportamiento dinámico" del consumo privado, aunque "posiblemente algo atenuado" con respecto al final de 2015.

En cuanto a la rama industrial, el Banco de España indicaba que los indicadores cualitativos evolucionaron durante el primer trimestre en direcciones opuestas. Por un lado, el PMI de manufacturas retrocedió en marzo, mientras que el índice de confianza industrial de la Comisión Europea se recuperó ligeramente en ese mes.

Respecto al sector servicios, la autoridad monetaria apuntaba a una "ligera moderación" del comportamiento expansivo de la actividad, mientras que la construcción también habría registrado en este periodo una "leve desaceleración".

En cuanto al mercado laboral, el Banco de España señalaba que los indicadores de empleo mantuvieron, al final del primer trimestre, un "tono positivo", con un avance interanual de los afiliados a la Seguridad Social en marzo del 2,8%, ligeramente por debajo del observado en los meses previos.