Ficha técnica 97 - Real Madrid: Sergio Rodríguez (16), Llull (10), Rivers (7), Ayón (17) y Lima (6) -equipo inicial- Carroll (21), Hernangómez (6), Taylor (5), Doncic (4), Ndour (2), De la Rua (3) y Radoncic (0). 79 - Estudiantes Jaime Fernández (11), Laprovittola (5), Hernangómez (11), Nacho Martín (27) y Xavi Rey (6) -equipo inicial-, Bircevic (7), Vicedo (3), Thomas (0), Javi Salgado (6), Sainsbury (-), Brizuela (3) y Guerra (-). Parciales: 22-21, 28-18, 25-22 y 22-18. Árbitros: Pérez Pérez, Araña y Pérez Niz. Incidencias: Partido correspondiente a la décima novena jornada de la Liga Endesa disputado en el Barclaycard Center ante 9.814 espectadores.

No fue un derbi con destino a las videotecas. Ni el Real Madrid atraviesa sus mejores momentos del curso -alterna actuaciones de un notable baloncesto con otras sembradas de dudas- ni tampoco el Estudiantes está en una de sus mejores épocas al estar inmerso en una travesía sin destino conocido. Si el cuadro colegial, además, estrena entrenador -Sergio Valdeolmillos- y busca en el mercado cómo reforzar su estructura, el Real Madrid suma desgracia tras desgracia en forma de problemas físicos: Rudy Fernández, Nocioni, Reyes y Maciulis -más del descartado Thompkins- presenciaron el derbi desde su asiento en las cercanías del banquillo. En este panorama, el Real Madrid coció a fuego lento su triunfo sobre Estudiantes. No tuvo que emplearse a fondo. Era cuestión de tiempo y talento que el cuadro de Laso acabara imponiéndose en el ritmo de juego y en los puntos.

El Estudiantes -sólo tres triunfos en el presente curso- afrontó el derbi sin ningún complejo. Sorprendió su puesta en escena. Ningún reproche. Jugó de tú a tú al Real Madrid. Y no fue un tuteo de cuestión de minutos. Hasta sobrepasado el ecuador del segundo cuarto no comenzó a distanciarse el Real Madrid. Hasta ese momento del encuentro, el Estudiantes se movió con cierta soltura en ataque. Bien es cierto que ya sabemos que el Real Madrid no defiende como hacía en tiempos no muy lejanos. Los comienzos de los del Ramiro de Maeztu fueron para Nacho Martín, con 9 puntos consecutivos a base de triples. El colegial amargó el estreno del brasileño Lima ante sus nuevos parroquianos. Ya que le mencionamos, tuvo un debut de menos a más en el Palacio de los Deportes. Laso encontró el antídoto. Ndour secó a Nacho Martín. No hubo más noticias. Estudiantes entonces tiró de Javi Salgado y de uno de los jugadores con mayor proyección del baloncesto español: Juancho Hernangómez.

Clase magistral de Sergio Rodríguez
Este convincente arranque de derbi para Estudiantes no fue una percepción del cronista. Los números, esos que en baloncesto dicen verdades como puños, concluyeron que el conjunto de Valdeolmillos superaba al Real Madrid en valoración al término del primer cuarto: 28 a 25. Aunque el marcador era de dominio blanco: 22-21. Aparte de esta buena predisposición del conjunto colegial, el Real Madrid contó con el impulso de Sergio Rodríguez. El ‘Chacho’ -criado en la cantera de Estudiantes- ofreció un recital de control del balón y de anotación: 11 puntos en 10 minutos, con sólo un error de tiro y 12 de valoración. El Real Madrid se movía al son que marcaba Sergio Rodríguez.

Tanto es así que cuando tuvo que descansar, el Real Madrid lo notó en su juego. No había tanta claridad en ataque. Entonces es cuando se comprobó que Carroll -9 puntos seguidos- está para esos momentos duros, cuando se necesita un fontanero que vuelva a dar caudal a las cañerías. El francotirador blanco encontró apoyo en Willy Hernangómez. Otra gran noticia. Con un panorama de ausencias en la zona, el canterano comienza a hacerse fuerte, muy fuerte. Tanto en ataque como en defensa. Con los puntos de ambos, el Real Madrid tomó una primera distancia sería: 28-21. Pero Javi Salgado y Juancho Hernangómez -el hermano de Willy- sostuvieron a Estudiantes, cuyo fondo de armario no es tan completo y elegante como el del Real Madrid. Y eso se nota.

Se notó, además, cuando regresó a pista Sergio Rodríguez. El Estudiantes ya estaba en su punto medio de cocción y entonces el ‘Chacho’ se encargó de dinamitar el encuentro: unas canastas por aquí, unas asistencias por allá (Ayón y Lima fueron los más beneficiados) y el Real Madrid en distancia sobre Estudiantes. De un 43-34 se pasó al 50-39 al alcanzar el descanso. Y el ‘Chacho’ con 14 puntos y 18 de valoración. El grupo de Laso ya estaba donde quería y donde se maneja con soltura. Quedaba por confirmar si harían su desconexión de algunos encuentros o sellarían rápidamente el triunfo en el derbi. Quedaba también por comprobar si Estudiantes, una vez tomado el aire del descanso, volvería a tutear al quíntuple campeón del ejercicio pasado. Había otros 20 minutos en el horizonte.

Nacho Martín, su réplica
Cinco minutos fueron suficientes para comprobar que aún está vivo el derbi. Que Estudiantes -quizá muchos de sus problemas sean mentales- iba a plantar cara al Real Madrid. Se notaba en el grupo otra motivación. Quizá porque había derbi o quizá porque Valdeolmillos insufló aire fresco. Sea una cosa u otra, al ecuador del tercer acto, el Real Madrid sólo ganaba por una exigua ventaja: 56-50. El Real Madrid perdió su norte, es decir a Sergio Rodríguez y sólo Ayón mantenía el tipo. Enfrente, Nacho Martín -nuevamente emparejado con Lima- era un bastión anotador: de los 9 puntos del primer cuarto pasó a cerrar acto con 22 (acabaría con 27 y 30 de valoración). Y Jaime Fernández movía bien a un equipo que apretaba a un Real Madrid con esas dudas que últimamente tanto le hacen compañía.

Pero Estudiantes volvió a padecer su falta de oxígeno y el talento del Real Madrid. Sus tres últimos minutos del tercer cuarto fueron una pesadilla: dos triples consecutivos, más una canasta, de Llull y otras tantas de Ayón volvieron a impulsar al Real Madrid: 75-61. Los colegiales tenían que volver a remar contra la marea blanca. No era un derbi de gran baloncesto, pero se mantenían unas ciertas dosis de emoción, aunque todo hacía presagiar (la valoración era 95 a 66) el triunfo madridista, el duodécimo consecutivo en su feudo. Y así ocurrió. Estudiantes, sin el aporte de Nacho Martín y Hernangómez, desciende mucho, tanto como su intensidad porque el partido fue largo para ellos. Y el talento y calidad del Real Madrid hizo el resto. El grupo de Laso vivió un cuarto final bastante plácido. Hubo ya canastas de puro espectáculo. Y De la Rúa tuvo sus minutos y puntos. Notable estreno. Buena noticia a tenor de los últimos desenlaces. El derbi fue hacia el casillero del Real Madrid.