Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | voluntariado | Sociedad

Contra el silencio cómplice

Durante mucho tiempo, a los voluntarios sociales nos han presentado como personas extraordinarias
José Carlos García Fajardo
martes, 19 de mayo de 2015, 21:03 h (CET)
Se puede engañar a unos pocos durante un tiempo, pero no a todos indefinidamente. Los datos de la ciencia, la experiencia compartida de los pueblos y el creciente diálogo intercultural están en órbita gracias al desarrollo de las comunicaciones que nos permiten ser testigos de excepción del ocaso de unos modelos de desarrollo que han llegado a un punto de saturación que no tiene retorno, porque ha alcanzado el techo de su propia contradicción.

Ignorarlo es no saber escrutar los signos de los tiempos, y silenciarlo es convertirse en cómplices. Algo no puede ir bien cuando la vida se transforma en espera, muchas veces sin esperanza. Lo malo es cuando no se actúa por temor a equivocarse o por dudar de la capacidad para hacer algo por los demás. Durante mucho tiempo, a los voluntarios sociales nos han presentado como personas extraordinarias.

En realidad, se trata de personas capaces de descubrir a tiempo la radical indigencia de toda criatura y de comprender que, en el reconocimiento de la propia debilidad, están las raíces de la auténtica fortaleza. Un día comprendemos que nos agobiábamos por problemas que perdían su virulencia ante las verdaderas desgracias que se descubren cuando nos asomamos a los umbrales de la marginación y de la desesperanza. Uno se pasma de haber estado pasando tantos años junto al dolor y junto a la soledad de los que estaban ahí, “a la vuelta de la esquina”.

La gota que se sabe océano, la persona que se sabe humanidad y, por lo tanto, insustituible, única, tiene una actitud radicalmente distinta a las de las gentes manipuladas por el consumismo, las prisas, la inseguridad y el miedo. No hay que calentarse la cabeza buscando ocasiones extraordinarias para hacer cosas grandes. Quizá nunca lleguen esas ocasiones. No existen límites de edad, de sexo o de condición social para practicar la solidaridad. Lo que importa es echarse a andar, ponerse en camino y sentir la pasión por la justicia; luego nos damos cuenta de que es más fácil de lo que suponíamos vivir la experiencia de compartir la soledad de los demás, su marginación y su abandono.

Nunca es tarde para comenzar porque hoy es siempre, todavía. Siempre se pueden sacar dos horas a la semana de cualquier actividad. No tenemos que hacer más. Así no nos cansaremos y podremos ser fieles a esa cita con lo mejor de nosotros mismos: con el que nos necesita y se agarra a la mano que le tendemos, abierta y pobre, pero generosa.

Noticias relacionadas

En el 2013 un desafío para los países latinoamericanos era continuar gestionando la entrada de flujos de capitales extranjeros, cuya presión aumentó como consecuencia de la política de expansión monetaria recientemente anunciada en Japón.

Una de las paradojas del mundo moderno la representa el éxito, y ese éxito recae en su discurso cultural. La izquierda jamás arregla las desigualdades ni mejora la situación de los desfavorecidos, ya que suele arruinarlos a todos con su habitual dispendio económico, su típica voracidad tributaria, su nula capacidad de gestión y la consolidación de una casta gobernante que acumula todos los privilegios.

Solo una vez en la historia mundial se detonaron armas nucleares sobre civiles. Esto ocurrió hace 80 años cuando EEUU devastó Hiroshima el 6 de agosto de 1945 y Nagasaki tres días después. Seis días después Japón se rindió. Ambas matanzas causaron 150.000-250.000 muertos.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto