Ficha técnica 80- Baloncesto Sevilla: Woodside (-), Berni (11), Byars (11), Oriola (3), Balvin (-) -cinco inicial--; Penney (15), Urtasun (3), Radicevic (15), Porzingis (9) y Hernangómez (13). 69- Bilbao Basket: Colom (8), Bertans (8), Mumbrú (16), Wragge (2), M. Todorovic (11) --cinco inicial--; Hervelle (7), D. Todorovic (3), Williams (10), Raúl López (2), Andusic (-) y Borg (2). Parciales: 17-17, 30-20, 16-22 y 17-10 Árbitros: Hierrezuelo, Oyón y Mas Cagide Incidencias: 21ª jornada de la Liga Endesa 14-15. 3.585 espectadores en el Palacio de los Deportes San Pablo (Sevilla).

San Pablo, aunque sólo a medio llenar, rugió como en las grandes ocasiones, y con mucha razón. Porque un espectacular Baloncesto Sevilla ha tumbado esta noche al tercero de la Liga Endesa, el Bilbao Basket, logrando su sexta victoria -tercera seguida- y saliendo provisionalmente de los puestos de descenso.

Gran partido en lo colectivo de los de Luis Casimiro, con cinco hombres por encima de los diez puntos y seis con más de diez de valoración. Y combinando, a partes iguales, espectáculo en ataque y garra en defensa cuando tocaba. Queda claro que tomaron buena nota de la paliza que les infligió el Turow polaco el pasado miércoles.

Dos campeones del mundo como Berni Rodríguez -que celebró sus históricos12.000 minutos en la ACB de la mejor forma posible- y Mumbrú comenzaron llevando la batuta de sus respectivos equipos. El malagueño, anotando para el Baloncesto Sevilla; el catalán, encestando y reboteando por encima de un Byars que comenzó un tanto apagado, aunque luego se entonaría. 

Así, con Colom dirigiendo las operaciones bilbaínas y con los visitantes dominando el rebote ofensivo con Marko Todorovic, el marcador señalaba 7-13 para Bilbao Basket a falta de dos minutos para el final del primer cuarto. 

Baloncesto Sevilla, imparable en ataque

Fue entonces, con Radicevic y Porzingis en cancha, cuando el Baloncesto Sevilla comenzó a paliar las deficiencias reboteadoras con una increíble capacidad ofensiva. Tras el empate a 17 del final del primer cuarto -2+1 postrero de Hernangómez-, la batería anotadora de los sevillanos se disparó sobresalientemente en el segundo, hasta alcanzar los 30 puntos en esos diez minutos. 

Hernangómez y Porzingis dominaban en la zona -el primero, con eficacia; el segundo, con dosis de espectacularidad-; mientras que, por fuera, lo hacían Radicevic... y Penney. 

El neozelandés por fin vio aro, sumando un total de 15 puntos con 3 de 3 en triples. Una canasta dio la primera ventaja a su equipo en bastantes minutos (21-19); y un triple suyo puso los ocho de renta en el electrónico (37-29, min 17). 

Sin Colom, Mumbrú y M. Todorovic en pista, Bilbao sufría lo suyo a pesar de los contundentes mates, hasta tres, del ex cajista Latavious Williams. Pero cuando ellos regresaron, la cosa no fue a mejor porque los locales estaban desatados. 

Un 2+1 de Porzingis, con sideral mate incluido, y otro triple, éste de Radicevic, dieron la máxima renta al Baloncesto Sevilla (45-35), que logró mantenerla hasta el descanso gracias a una nueva canasta del letón, y al doble fallo bajo el aro de M. Todorovic. 

Reacción sofocada

Claro que Bilbao debía reaccionar, y así sucedió después de que el Baloncesto Sevilla adquiriera su máxima ventaja de todo el partido: 55-41 mediado el tercer cuarto, con canasta de Berni. Los "hombres de negro" -que hoy iban de blanco- cerraron filas atrás; y un triple de Mumbrú, dos más de Bertans y un mate de Williams les acercaron peligrosamente (60-59) antes de que Penney, con un oportuno triple para los suyos, echara el cerrojo al tercer período (63-59). 

En el último cuarto aparecieron, por momentos, los nervios a la hora de cerrar el partido por parte sevillana. No obstante, los de Casimiro lograron controlar por fin su rebote defensivo, y la aportación anotadora bilbaína quedó reducida a tan sólo diez puntos a lo largo de los últimos diez minutos. 

Con once arriba para el Baloncesto Sevilla tras canasta de Hernangómez (74-63, min 34), Sito Alonso se la jugó con el joven sueco Tobias Borg en el puesto de base; pero los suyos tan sólo lograron entrar en el partido merced a las puntuales precipitaciones antes aludidas de los verdirrojos. 

Así, Bilbao llegó a estar a seis (75-69) a falta de 41 segundos; pero dos tiros libres de Penney y un error posterior en el ataque vasco sentenciaron por fin un duelo al que echó el cierre Byars con un triple postrero que desató el delirio en las gradas de un San Pablo que volvió a entonar el ya clásico "sí, se puede". Bilbao Basket, por su parte, se aleja un poco del liderato, y llegará a la Copa con una derrota con la que, posiblemente, en el fondo no contaba.