Decía Winston Churchill que una pandorga se eleva más alto en contra del viento, no a su favor, y es lo que ha venido sucediendo con el movimiento que impulsa al diputado Oscar Tuma a la Intendencia de Asunción.

A medida que arrecian los ataques contra su grupo, mayor es la cantidad de muestras de apoyo que recibe. Y aunque sus adversarios del clan Samaniego hayan redoblado últimamente su apuesta por el sistema prebendarlo, gestionando más fondos para la actual administración municipal y sus favorecidos, gran parte de la sociedad ha empezado a dar señales de su hastío.

Incapaces de revertir la tendencia desfavorable de opinión, los Samaniego han apelado al caduco modelo de recurrir a medios decadentes y montar operativos de prensa, precisamente en momentos en que los medios empresariales del país se encuentran afectados por una grave crisis. Precisamente a través de estos medios han azuzado la división de su propia nucleación política, intentando responsabilizar de sus propias faltas a sus adversarios.

Para el diputado Óscar Tuma, en realidad es la presidenta Lilian Samaniego quien genera división dentro del Partido Colorado. Una vez más, el parlamentario sugiere a su correligionaria que dé un paso al costado, dado que su hermano es candidato a la reelección como alcalde de Asunción.

Las internas en el partido que gobierna Paraguay se adelantaron y están candentes, sobre todo tras la difusión de unos videos pornográficos del senador Juan Carlos Galaverna, que también generaron fuertes acusaciones entre colorados.

Ante este panorama, Lilian Samaniego sostuvo que el partido está “al borde de una división” y que de darse la fractura “ningún sector saldría beneficiado”.

Tuma salió al paso de estas expresiones y afirmó que es Lilian quien genera división. Indicó el partido de Bernardino Caballero necesita interlocutores imparciales y “hoy ella no lo es”.

“Hace cuatro meses atrás dije que esto iba pasar si no renunciaba y ahora digo que si no toma esa actitud de grandeza ‘se nos viene la noche’ y será ella la única responsable”, declaró el parlamentario.

Tuma agregó “tiene que tener la actitud que tuvieron otros para con ella años atrás. Si realmente quiere al partido como manifiesta es el momento de buscar una persona imparcial que dirija los destinos del partido, en base al interés general y no personal”.

“Yo digo las cosas por sobre la mesa, ese sector (por el grupo de Samaniego) lo hace por debajo de la mesa. Y eso destruye mucho más a las instituciones”, enfatizó al tiempo de proponer un gran diálogo entre los principales líderes colorados para buscar un presidente imparcial hasta el 2016.

El político también se refirió a la “fuga” de presidentes de seccionaleros de su equipo electoral, que lidera junto al senador Julio César Velázquez, desmintiendo las versiones interesadas propaladas por la prensa de la Secta Moon. Indicó que no pueden haberse retirado 25 seccionaleros de un grupo que sólo integraban 23.

Carlos Morel, titular de la seccional colorada Nº 1, afirmó que por “la posición contraria al presidente de la República Horacio Cartes que adoptaron tanto Tuma como Velázquez resolvieron 25 presidentes de Seccional se apartaron para iniciar conversaciones con los Samaniego”. Sin embargo, no dio nombres y fue el único en abrir la boca.

“De 23 presidentes quedamos 17, no salieron por las supuestas críticas hacia Cartes sino por intereses personales y me parece bien, cada uno sabe donde le aprieta su zapato”, aclaró Tuma, quien también dijo estar satisfecho porque lograron que se los tenga en cuenta.

Indicó que siempre deseó que logren algún puesto, y que si los llamaron los Samaniego es gracias a la postura crítica adoptada desde el grupo de Velazquez. En cuanto a la senadora Lilian Samaniego, consideró que lo más razonable para el partido es su renuncia.

Decía Disraelí que después de saber cuándo debemos aprovechar una oportunidad para lograr ventajas, lo más importante es saber cuándo debemos renunciar a esa ventaja obtenida.

El clan Samaniego demostró que conoce de la primera cualidad, le falta demostrar su capacidad para la segunda.