Los servicios de rescate han localizado los cadáveres de 251 personas
en el lugar del siniestro del avión de pasajeros de Malaysia Airlines caído
en el este de Ucrania, así como restos correspondientes a otros 86
cuerpos, según un comité gubernamental ucraniano.

En su comunicado, el comité que investiga el desastre ha señalado que
el primer tren, que trasladará los restos de casi 200 víctimas, se
encuentra parado en la estación de la localidad de Torez "porque los
terroristas están bloqueando su salida", en referencia a los separatistas
prorrusos.
Durante la jornada del domingo, la Organización para la Seguridad y la Cooperación en
Europa (OSCE) dio cuenta de que los separatistas habían informado a la organización de
que 167 cuerpos habían sido trasladados a un tren con vagones refrigerados y de que los
observadores han podido inspeccionar tres de estos vagones.
Sin embargo, el viceprimer ministro
ucraniano, Volodimir Groisman, aseguró en
rueda de prensa que en el tren hay ya 192
cuerpos y ocho restos más, pero indicó que los
separatistas aún no han autorizado que el tren
se mueva.
Los rebeldes respondieron apuntando que
Kiev ha retrasado la llegada de los expertos y
que no pueden hacer nada hasta que éstos
accedan al lugar del siniestro. "Por ahora se
quedan aquí hasta que se resuelva la cuestión"
de qué hacer con los restos, dijo un responsable
de la autoproclamada República Popular de
Donetsk, Sergei Kavtaradze. "Estamos esperando a los expertos", argumentó.
Otro dirigente separatista, Andrei Purgin,
afirmó con sarcasmo que los investigadores deben estar viniendo "andando desde Kiev"
en referencia a la tardanza de su traslado a la zona. "Es muy difícil obtener un visto bueno
por escrito (...) para que movamos los cuerpos (...) para garantizar que después no puedan
de cir que nosotros, salvajes, hemos dejado a la gente a pleno sol", explicó.
El Ejecutivo ucraniano ha culpado a los separatistas de haber derribado el avión con un
misil-tierra aire. Por su parte, el primer ministro de la autoproclamada República Popular
de Donetsk, Alexander Borodai, ha dicho que la caída de la aeronave se debió a una
acción de la Fuerza Aérea ucraniana.