La selección española de balonmano ha vencido a Noruega (25-27) en el encuentro correspondiente a la segunda jornada de la primera fase del Europeo de balonmano que se está celebrando en Dinamarca, en un partido que dominó con sobriedad durante la primera parte, pero que se le complicó durante la segunda y sufrió hasta el final para doblegar a los nórdicos.

Una victoria que dio a los 'hispanos' la clasificación directa para la segunda fase de la competición. Los de Manolo Cadenas lideran el grupo B con cuatro puntos, uno más que Islandia, con el que se verá las caras el jueves y que este martes empató ante Hungría. En esa segunda fase, España se enfrentará con uno de los 'cocos' del torneo, la anfitriona y actual campeona, Dinamarca, que también consiguió este martes su clasificación.

A España le costó encontrar el camino del triunfo en el pabellón Gigantum de Aalborg. En un encuentro en el que la campeona mundial partía con el cartel de favorita, una segunda parte para el olvido estuvo cerca de costarle un tropiezo que le hubiera complicado la vida, sobre todo de cara a la segunda fase.

A falta de diez minutos para el final, eran los noruegos los que estaban delante en el marcador (21-20), después de 20 minutos en los que España empañó todo lo bueno realizado hasta entonces. Mal en defensa e inacertada en ataque, la selección de Manolo Cadenas se dejó remontar los cuatro goles de ventaja (8-12) con los que llegó al descanso en poco más de 10 minutos (15-15).

Los nórdicos, conscientes de su inferioridad, imprimieron una dura defensa y se encomendaron al talento de Bjarte Mirhol y Ole Erevik. El primero fue un constante tormento para la zaga española y acabó el partido con siete goles. El que no tuvo la misma eficacia fue el exjugador de Ademar León y gran cañonero Kristian Kjelling que solo hizo un gol en siete lanzamientos.

Erevik, por su parte, realizó un sensacional choque en la portería, con un 40% de acierto y, sobre todo, minando la moral española al detener tres lanzamientos desde los siete metros a tres jugadores (Rocas, Rivera y Victor Tomás), de manera consecutiva.

Cañellas y Maqueda al rescate
La portería fue durante mucho tiempo la protagonista del partido. Erevik estuvo sensacional, pero mejor aún estuvo José Manuel Sierra. El onubense detuvo el 50% de disparos que le llegaron y fue el responsable principal de que España tomara ventaja en la primera parte. Es cierto que se vio sobrepasado en los malos momentos del equipo español, pero su actuación hizo olvidar que en este campeonato le falta a España Arpad Sterbik.

Pero no fue Sierra, ni siquiera Víctor Tomás (máximo anotador del partido con ocho tantos) los que rescataron a España. Ese mérito se lo pueden anotar en la jornada de este martes dos hombres: Jorge Maqueda y Joan Cañellas. A grandes males grandes remedios. Y al mal juego de España se impuso el carácter de dos hombres que juntos suman 395 centímetros de estatura y 205 kilogramos de peso.

Maqueda anotó dos goles en el partido, pero su actuación fue crucial en los momentos cumbre. El manchego forzó dos siete metros claves (el segundo de ellos con exclusión incluida al defensor noruego) a los que acompañó de sendos alaridos que sirvieron para conectar al equipo entero. Y para evitar que se escuchara durante unos segundos a los aficionados noruegos, mayoría en la sala danesa.

Y si Maqueda forzó situaciones de siete metros, Cañellas se encargó de ejecutarlas. Fue el jugador catalán el que asumió la responsabilidad cuando Erevik estaba con la moral por las nubes. Y tras cinco goles seguidos desde la línea de penalti, el gigante de Santa María de Palautordera acabó por derruir toda señal de explendor en el guardameta noruego.

España sufrió pero venció. El próximo jueves (18:00 horas) los 'hispanos' tratarán de vencer a Islandia para pasar a la siguiente fase con cuatro puntos y tener así más claro el horizonte de cara a la lucha por las medallas.