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¿Superioridad moral de la izquierda, de la derecha, de quién?

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Con pajarita y sin tapujos es el título del libro que va a publicar Inocencio Arias como ha anunciado en el diario ABC. Parece que la idea, al menos del primer capítulo, es su intento de desmontar la falsa superioridad moral de la izquierda que se mantiene gracias a sus propias mentiras que ha conseguido difundir a través de todos los medios. Quizás su superioridad está en la manipulación constante de la historia con la que viene adoctrinando a varias generaciones.

Pero si es justo desmontar la superioridad moral de la izquierda, por ello no hay que adjudicar a la derecha ninguna superioridad moral, entre otras cosas porque a menudo ha traicionado los valores que decía defender y está pagando en las urnas la desidia de los gobernantes del Partido Popular que, en lugar de derogar las leyes de Zapatero, cuando tuvieron una legislatura entera para hacerlo, han hecho un seguidismo cobarde de tales leyes, memoria histórica, violencia de género, ampliación del aborto, ideología de género, contemporización con los criminales de ETA y los separatistas que pretenden romper España, quizás porque han sido abducidos por la nefanda idea de la izquierda de que esto es lo que constituye el progreso.

Aunque puestos a pensar mal de la izquierda y la derecha, puede que ambos reciban instrucciones de algún poder superior y secreto que desde la sombra dicta a toda Europa los principios que tienen que obedecer. Cualquiera que se oponga lo tiene crudo, será etiquetado de fascista (aunque la mayor parte de la gente no tenga ni idea de lo que fue el facismo) o de franquista, cuando los que vivimos durante la vida de Franco somos una minoría en proceso de desaparición.

Tanto la izquierda como la derecha española tienden a ocupar el poder y disfrutar del mismo todo el tiempo posible, a costa de los ciudadanos, revolcándose en la corrupción caciquil, (el clientelismo del PER o los fondos de formación, los famosos ERES andaluces) las comisiones a cambio de adjudicaciones (la Gurtel, Bárcenas, la púnica…) El famoso tres por ciento en catalán, Banca catalana etc. desde Pujol que sigue libre disfrutando de sus fechorías hasta el infeliz de Urdangarín que sigue preso)

Derecha, izquierda, centro ¿quién tiene la más mínima superioridad moral? Quizás por ello la aparición de un partido nuevo, que dice cosas distintas, ha metido el miedo en el cuerpo a los demás y sin rebozo alguno quieren eliminarlo del mapa con falsedades que se encarga de difundir la Brunete mediática. Ignoro si cuando lleguen al poder, si llegan, también se corromperán o mantendrán el tipo.

Desde el día de las elecciones a hoy están pasando muchas cosas sorprendentes y todas malas o problemáticas, con el jefe del Estado enviado a Cuba, quizás para que no estorbe abriendo el reglamentario el periodo de consultas.

Nadie impone orden en Cataluña. El señor Torra tiene la llave de los CDR a los que desconectó en día de reflexión y el de las votaciones, pero ha vuelto a activar para que corten la carretera que nos une a Francia.

Está claro que el ministro del interior, en funciones, no funciona. ¿Nadie le pedirá cuenta de su nefasta gestión? ¿Nadie procesará a Torra y a Torrent? ¿Con la patraña de España plurinacional pueden conseguir el número de votos que la faltan, a cambio de dinero, indultos y diálogo, mucho diálogo?

¿Superioridad moral? Bah es el poder, ¡estúpido!

¿Superioridad moral de la izquierda, de la derecha, de quién?

Buscar el poder a cualquier precio y disfrutarlo todo el tiempo posible
Francisco Rodríguez
jueves, 14 de noviembre de 2019, 08:24 h (CET)

Con pajarita y sin tapujos es el título del libro que va a publicar Inocencio Arias como ha anunciado en el diario ABC. Parece que la idea, al menos del primer capítulo, es su intento de desmontar la falsa superioridad moral de la izquierda que se mantiene gracias a sus propias mentiras que ha conseguido difundir a través de todos los medios. Quizás su superioridad está en la manipulación constante de la historia con la que viene adoctrinando a varias generaciones.

Pero si es justo desmontar la superioridad moral de la izquierda, por ello no hay que adjudicar a la derecha ninguna superioridad moral, entre otras cosas porque a menudo ha traicionado los valores que decía defender y está pagando en las urnas la desidia de los gobernantes del Partido Popular que, en lugar de derogar las leyes de Zapatero, cuando tuvieron una legislatura entera para hacerlo, han hecho un seguidismo cobarde de tales leyes, memoria histórica, violencia de género, ampliación del aborto, ideología de género, contemporización con los criminales de ETA y los separatistas que pretenden romper España, quizás porque han sido abducidos por la nefanda idea de la izquierda de que esto es lo que constituye el progreso.

Aunque puestos a pensar mal de la izquierda y la derecha, puede que ambos reciban instrucciones de algún poder superior y secreto que desde la sombra dicta a toda Europa los principios que tienen que obedecer. Cualquiera que se oponga lo tiene crudo, será etiquetado de fascista (aunque la mayor parte de la gente no tenga ni idea de lo que fue el facismo) o de franquista, cuando los que vivimos durante la vida de Franco somos una minoría en proceso de desaparición.

Tanto la izquierda como la derecha española tienden a ocupar el poder y disfrutar del mismo todo el tiempo posible, a costa de los ciudadanos, revolcándose en la corrupción caciquil, (el clientelismo del PER o los fondos de formación, los famosos ERES andaluces) las comisiones a cambio de adjudicaciones (la Gurtel, Bárcenas, la púnica…) El famoso tres por ciento en catalán, Banca catalana etc. desde Pujol que sigue libre disfrutando de sus fechorías hasta el infeliz de Urdangarín que sigue preso)

Derecha, izquierda, centro ¿quién tiene la más mínima superioridad moral? Quizás por ello la aparición de un partido nuevo, que dice cosas distintas, ha metido el miedo en el cuerpo a los demás y sin rebozo alguno quieren eliminarlo del mapa con falsedades que se encarga de difundir la Brunete mediática. Ignoro si cuando lleguen al poder, si llegan, también se corromperán o mantendrán el tipo.

Desde el día de las elecciones a hoy están pasando muchas cosas sorprendentes y todas malas o problemáticas, con el jefe del Estado enviado a Cuba, quizás para que no estorbe abriendo el reglamentario el periodo de consultas.

Nadie impone orden en Cataluña. El señor Torra tiene la llave de los CDR a los que desconectó en día de reflexión y el de las votaciones, pero ha vuelto a activar para que corten la carretera que nos une a Francia.

Está claro que el ministro del interior, en funciones, no funciona. ¿Nadie le pedirá cuenta de su nefasta gestión? ¿Nadie procesará a Torra y a Torrent? ¿Con la patraña de España plurinacional pueden conseguir el número de votos que la faltan, a cambio de dinero, indultos y diálogo, mucho diálogo?

¿Superioridad moral? Bah es el poder, ¡estúpido!

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