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Juan Pablo Mañueco

Divorcios y 'huérfanos de vivos'

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LA NOTICIA ha saltado recientemente a los medios de comunicación, con todos los tintes alarmistas que su fuente (el Instituto de Política Familiar) quería darle: cada día se rompen 400 matrimonios en España.

Bien, pues ni siquiera estos alarmistas han sabido encontrar lo verdaderamente alarmante, aunque se silencie: que en España cientos de niños quedan "huérfanos de vivos" cada día, porque no podrán relacionarse con uno de sus padres. El que no consiga la custodia sobre ellos. Porque el progenitor que sí la consiga podrá vengarse del otro de esa forma, impunemente.

Lo saben los Tribunales, pero no hacen nada para que los derechos del niño a relacionarse con ambos progenitores se garanticen en la práctica. De esta negligencia judicial, verdaderamente alarmante, de esta violencia salen muchas de las situaciones que luego estallan aún más violentamente, incluso con sangre.

Pero nadie, ni siquiera el Instituto alarmista que ha dado la noticia de abajo, sabe destacar lo verdaderamente grave y alarmante.

150.000 divorcios al año en España. Pero, sobre todo, decenas de miles de "huérfanos de vivos" también por año, sin que nadie haga nada.

¿Influye el caos de la Justicia en el agravamiento de la violencia de pareja? DESDE LUEGO QUE SÍ, influye y mucho.

Para empezar es causa necesaria para que ocurra esa manifestación principal por su número de la violencia familiar de la que nunca se habla: la existencia de casi un millón de "huérfanos de vivos" en España.

Pero también el caos judicial (incumplimiento de sentencias, lentitud de los procedimientos que mantienen viva una situación tensa durante años, estrategias habituales de los juzgados: testigos falsos, testimonios sin contenido de verdad, calumnias generalizadas para obtener ventajas...) sirve para desencadenar conflictos que, con una Justicia distinta, no estallarían de este modo.

¿Todos los conflictos que posteriormente estallan con muerte se desencadenan en los juzgados? Por supuesto que no. Pero sí puede decirse que las características de la Justicia española comentadas son un espléndido caldo de cultivo para que TODOS los conflictos se perpetúen y avancen.

Cuando oigan hablar de violencia de pareja en España... miren al menos con un ojo hacia el juzgado. Allí habrá también cuestiones comentables.

Divorcios y 'huérfanos de vivos'

Juan Pablo Mañueco
Juan Pablo Mañueco
lunes, 4 de septiembre de 2006, 05:05 h (CET)
LA NOTICIA ha saltado recientemente a los medios de comunicación, con todos los tintes alarmistas que su fuente (el Instituto de Política Familiar) quería darle: cada día se rompen 400 matrimonios en España.

Bien, pues ni siquiera estos alarmistas han sabido encontrar lo verdaderamente alarmante, aunque se silencie: que en España cientos de niños quedan "huérfanos de vivos" cada día, porque no podrán relacionarse con uno de sus padres. El que no consiga la custodia sobre ellos. Porque el progenitor que sí la consiga podrá vengarse del otro de esa forma, impunemente.

Lo saben los Tribunales, pero no hacen nada para que los derechos del niño a relacionarse con ambos progenitores se garanticen en la práctica. De esta negligencia judicial, verdaderamente alarmante, de esta violencia salen muchas de las situaciones que luego estallan aún más violentamente, incluso con sangre.

Pero nadie, ni siquiera el Instituto alarmista que ha dado la noticia de abajo, sabe destacar lo verdaderamente grave y alarmante.

150.000 divorcios al año en España. Pero, sobre todo, decenas de miles de "huérfanos de vivos" también por año, sin que nadie haga nada.

¿Influye el caos de la Justicia en el agravamiento de la violencia de pareja? DESDE LUEGO QUE SÍ, influye y mucho.

Para empezar es causa necesaria para que ocurra esa manifestación principal por su número de la violencia familiar de la que nunca se habla: la existencia de casi un millón de "huérfanos de vivos" en España.

Pero también el caos judicial (incumplimiento de sentencias, lentitud de los procedimientos que mantienen viva una situación tensa durante años, estrategias habituales de los juzgados: testigos falsos, testimonios sin contenido de verdad, calumnias generalizadas para obtener ventajas...) sirve para desencadenar conflictos que, con una Justicia distinta, no estallarían de este modo.

¿Todos los conflictos que posteriormente estallan con muerte se desencadenan en los juzgados? Por supuesto que no. Pero sí puede decirse que las características de la Justicia española comentadas son un espléndido caldo de cultivo para que TODOS los conflictos se perpetúen y avancen.

Cuando oigan hablar de violencia de pareja en España... miren al menos con un ojo hacia el juzgado. Allí habrá también cuestiones comentables.

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