Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | Sensible | Violencia | Machismo | Cazadores | Violencia Género

Otro crimen a manos de un cazador

¿Y cuántos van?
Julio Ortega Fraile
jueves, 14 de marzo de 2019, 16:48 h (CET)

Valga (Pontevedra): Javier Bello, de 46 años, mata a su mujer María José Aboy, de 43, con un tiro de su escopeta de caza.

Violento + Armas = Combinación muy peligrosa.

Cazador = Violento.

Así que Cazador armado = Violento armado = Muertos.

Cada poco tiempo comprobamos que esto se cumple y no se trata de excepciones como aseguran los cazadores, a menos que excepción sea igual a recurrente, pero como esto último es un postulado falso se deduce que los escopeteros mienten mientras muchas mujeres, sus mujeres, mueren tras ser encañonadas.

Asesinadas.

Por ellos.

Con sus armas. Armas legales.

¿Armas legales en manos de violentos comprobados?

¿Sería admisible poner de director de una guardería a quien demostrase tendencia a la pederastia?

¿Y de responsable de un centro de acogida de refugiados a un neonazi?

¿Qué tal los miembros de La Manada como magistrados en juicios por violación?

Pues si no llevamos a cabo las aberraciones que proponen las tres últimas preguntas para no tener que lamentar abusos infantiles, inmigrantes apaleados ni violadores libres, dejemos de entregar licencias de armas a personas a las que les gusta, y mucho, utilizarlas.

Sé que hay ciudadanos en general y políticos en particular que aun sin ser cazadores consideran que los animales están para ser explotados/torturados/ejecutados. Y aunque esta forma de pensar tenga como consecuencia que otros se sepan autorizados moral y legalmente para hacer algo tan espantoso como causar sufrimiento o arrebatarle la vida a quienes deberían tener tanto derecho a disfrutar de ella como nosotros, los humanos, espero que en esa solidaridad excluyente, en esa compasión selectiva, en esa empatía mutilada y en esa rabia «según quién, dónde y cómo», conserven al menos un ramalazo de cordura para darse cuenta de que el número de parejas/vecinos/desconocidos que van cayendo asesinados por disparos de cazadores es muy alto y que cada poco tiempo suma un dígito más.

Al cazador le gusta matar. La Administración le pone la escopeta y él se encarga de poner los muertos.

¿Cuántos féretros más hacen falta para que la sociedad ponga su hartazgo en las tripas de los políticos y éstos pongan en la ley la prohibición de armas para violentos? Es decir, para cazadores.

Noticias relacionadas

En el imaginario colectivo, la violencia es algo que sucede “fuera”, en las calles, en las noticias, en las guerras, en los crímenes. Nos han enseñado a identificarla en lo visible, en el golpe, en el grito, en la amenaza. Pero hay otras formas de violencia que no se oyen ni se ven, y que por eso mismo son más difíciles de reconocer y mucho más dañinas.

Entre las múltiples experiencias que he vivido a lo largo de mi vida destacan las tres semanas que permanecí embarcado, allá por los ochenta, en el Ramiro Pérez, un barco mercante en el que realicé el viaje Sevilla-Barcelona-Tenerife-Sevilla enrolado como un tripulante más.

Una rotonda es el espejo de una sociedad. Cuando quieras saber cómo es un país, fíjate en cómo se aborda una rotonda, cómo se incorpora la gente y cómo se permite –o no– hacerlo a los demás. Ahí aparece la noción de ceda el paso, esa concesión al dinamismo de la existencia en comunidad, la necesidad de que todo esté en movimiento, de que fluya la comunicación y que todo el mundo quede incorporado a la rueda de la vida.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto