MADRID, 04 (SERVIMEDIA)
El Ministerio de Cultura destinará este año más de 1,1 millones de euros a inversiones en el Museo Nacional y Centro de Investigación de Altamira, que se dedicarán a mejorar el acceso a las instalaciones, renovar la iluminación de la Neocueva, ahondar en el sistema de modelado digital BIM de la cueva y comprar un terreno para reforzar la conservación.
Así lo trasladó el ministro de Cultura, Ernest Urtasun, quien este miércoles presidió la reunión del Patronato del Museo Nacional y Centro de Investigación de Altamira, que se celebró en el municipio cántabro de Santillana del Mar, según informó Cultura.
Tras explicar que su departamento invirtió el año pasado alrededor de dos millones de euros en el museo, Urtasun avanzó que la cantidad para este año será de más de 1,1 millones. Esta partida económica se consagrará a mejorar el acceso a las instalaciones, renovar la iluminación de la Neocueva, ahondar en el sistema de modelado digital BIM de la cueva y comprar un terreno para reforzar la conservación.
Una de las conclusiones de la reunión es el acuerdo por unanimidad para que los jóvenes de Santillana del Mar que cumplan 18 años puedan acceder a la cueva original de Altamira el año en que alcancen la mayoría de edad. De este modo, de las 250 visitas que se permiten anualmente por cuestiones de conservación preventiva, 20 se reservarán a los chavales empadronados en el municipio.
Esta resolución se comenzará a aplicar con quienes cumplan 18 años en 2025, quienes podrán visitar la cueva en 2026. El sistema de selección lo concretará el Ayuntamiento de Santillana del Mar, "siempre bajo criterio de transparencia en la selección".
En lo concerniente al régimen de visitas general a la cueva original, el Patronato decidió mantenerlo para garantizar su conservación preventiva. A día de hoy, quienes visitan la cueva son citados por orden cronológico de solicitud de la lista de espera, que contiene peticiones desde 1999 hasta junio de 2002, cuando se cerró la cueva por cuestiones de conservación. Tras el cierre, las visitas se retomaron en 2014, limitadas a cinco personas a la semana seleccionadas por sorteo público. Este sistema fue modificado tras la pandemia, cuando se decidió retomar la lista de espera anterior, de la que se han gestionado hasta el momento las 720 primeras solicitudes.
La conservación de la cueva está sometida a un estricto sistema de seguimiento y control establecido en el Plan de Conservación Preventiva; mientras que las condiciones ambientales de la cueva están monitoreadas continuamente a través de tecnología puntera.
En ese sentido, el Instituto del Patrimonio Cultural de España presentó en la reunión una nueva herramienta de gestión, pionera en la aplicación de la tecnología BIM al patrimonio cultural, que permitirá crear un gemelo digital de la cueva.
Por último, el Gobierno de Cantabria informó de la cesión de dos terrenos cercanos al Museo de Altamira que permitirán incrementar el entorno de protección de la cueva; mientras que Cultura adquirirá un terreno anexo al recinto del museo, bajo el que discurre el último tramo de la cueva, y que permitirá garantizar su conservación integral.
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