El ministro del Interior, Jorge Fernández
Díaz, ha asegurado que junto a los estudiantes que protestaron el lunes
en Valencia había infiltrados "radicales y violentos" que son los que, a
su juicio, crean los problemas, y ha admitido que eso ha provocado
"algún exceso y alguna actuación desafortunada por parte de algún
policía".
En declaraciones a Catalunya Ràdio, ha
remarcado que si solo hubiera habido estudiantes, "la cosa se hubiera
desarrollado de manera diferente", y ha asegurado que una botella
lanzada por un radical hirió a una mujer.
Según él, algunos se aprovechan de la buena voluntad de los
menores y no tienen como objetivo una reclamación estudiantil, sino que
quieren aprovecharlo "como caldo de cultivo para lo que han hecho:
quemar las calles de Valencia".
Gallardón cree que la Policía ha actuado en Valencia “obligada” por la violencia provocada En declaraciones a Radio Nacional recogidas por Servimedia, Gallardón sostuvo que los policías han sido “violentamente agredidos” en Valencia, al tiempo que añadió que las autoridades no pueden “abdicar” de la “necesaria garantía de los derechos fundamentales”.
Al mismo tiempo, preguntado sobre si ha habido un exceso en la aplicación de la fuerza por parte de la Policía, el titular de Justicia señaló que hay que siempre hay que dar la “presunción de actuación legítima” a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, puesto que lo que están haciendo es garantizar nuestros derechos fundamentales.
Según el ministro, parte de los estudiantes han llevado a cabo “una violación de los comportamientos que están admitidos en una sociedad democrática”, por lo que la actuación policial ha sido “no solamente legítima, sino precisamente obligada para restablecer esa garantía de derechos fundamentales”.
Asimismo, estimó que “no sería ecuánime” hacer un “discurso de equiparación” entre la actuación policial y los comportamientos violentos. A su juicio, esto sería “devaluar” la labor de los agentes.
Por este motivo, Gallardón pidió que “no llevemos nuestras simpatías a los que atacan” frente a los policías, que son los que permiten que haya ciudadanos libres “en una nación libre”.
En cuanto al hecho de que se resalte que muchos de los que protestan en Valencia son adolescentes, el ministro declaró que “la presunción de quién realiza este tipo de cosas muchas veces se puede ver desmentida por los datos que, en su momento, estoy totalmente convencido, nos darán las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado”.
Por otra parte, el ministro defendió las reformas que su departamento ha planteado en cuestiones como el aborto o el sistema de elección de los vocales del CGPJ, puesto que lo que pretende el PP es volver al “amplio consenso” que en estas materias existió con los Gobiernos de Felipe González y José María Aznar.
Por lo que se refiere al juez Baltasar Garzón, el titular de Justicia dijo que le “preocupa” que los ciudadanos perciban algo distinto de que el Tribunal Supremo están actuando respecto a este magistrado en aplicación de la legalidad.
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