Croacia, con pie y medio en la Eurocopa tras su contundente victoria a domicilio (0-3) en Estambul en el partido de ida de la repesca celebrado el pasado sábado, espera este martes frenar la euforia y mantener la ventaja conseguida ante una Turquía, con importantes bajas y herida en su orgullo, que apelará a 'la heroica' intentando emular aquel espíritu que le llevó a eliminar a los croatas en los cuartos de final de la Eurocopa 2008 en la tanda de penaltis.

Los balcánicos saben que cualquier celebración prematura a pesar del buen resultado cosechado, puede ser fatal, porque no olvidan que tienen enfrente a la selección que les apeó de disputar las semifinales de la pasada Eurocopa en Austria y Suiza, donde un gol de Semih Senturk en los últimos segundos del partido, significó el empate ante una Croacia que saboreaba el billete, y que, posteriormente, cayó en los penaltis.

El seleccionador Slaven Bilic, aunque con las bajas por sanción del defensa Vedran Corluka, clave en Estambul, y el mediocentro Tomislav Dujmovic, cuenta con suficientes recambios para afrontar el partido con garantías, sabedor además de su buena fortaleza defensiva, especialmente en casa donde sólo han encajado cinco goles en los últimos seis partidos.

Por su parte, los turcos luchan con toda una tormenta de críticas lanzadas desde su país, tras la apabullante y deshonrosa derrota en casa ante más de 50.000 incondicionales, por lo que saldrán en tromba desde el inicio para intentar darle la vuelta a la estrepitosa derrota del partido de ida.

De todos modos, la misión se antoja casi imposible y los turcos, semifinalistas en Austria y Suiza 2008, están prácticamente fuera y tampoco les ayuda el estado anímico, aunque buscarán despedirse con buena imagen.

Para afrontar el milagro, Guus Hiddink no lo tendrá fácil, porque además del ambiente hostil también lidiará con las bajas de cuatro jugadores clave por sanción y Giray Kacar por lesión. Así, el holandés se verá forzado a realizar cambios en su once titular tras las bajas del atlético Arda Turan, Sabri Sarioglu, Emre Belozoglu y Hakan Balta por sanción.

Además, las estadísticas no son nada halagüeñas con respecto al poder ofensivo de la selección turca, quien en los últimos dos partidos fuera de casa ha obtenido dos empates y un gol a favor, y en los últimos nueve partidos, ha tenido un balance de 10 goles a favor y 8 en contra, a lo que hay que añadir la baja de Arda Turan, quien marcó en los últimos tres partidos de la fase de grupos, donde sólo pudo ganar a domicilio en Kazajistán.