Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | Política | Rajoy
La carrera política de Rajoy no es muy distinta a las de otras personalidades entre los populares

The only one

|

Rajoy ya ha comunicado que se presentará de nuevo como candidato para la presidencia del Partido Popular. El catch-all-party de los conservadores españoles con una estructura presidencialista y un sistema de selección de su ejecutivo configurado por los compromisarios es una de las mejores máquinas de gobernabilidad intrapartidista que existe en el sistema de partidos españoles. Su organización está dispuesta de forma que el presidente nacional dispone directamente de una gran cantidad de información y poder de decisión sobre su continuidad o no. De esta forma, sólo su decisión de abdicar en el cargo o no renovar, produce el cambio saludable de élites a nivel nacional en este grupo político.

La carrera política de Rajoy no es muy distinta a las de otras personalidades entre los populares. Lo que comenzó con un concejal en Pontevedra, pasando por distintos cargos parlamentarios tanto a nivel autonómico como nacional, culminó durante el Gobierno de Aznar en su elección como ministro. De ahí, dio paso a la pugna con Esperanza Aguirre por el liderazgo del partido y finalmente se consolidó durante la segunda legislatura de Zapatero como el indiscutible líder de la oposición.

Casi diez años después, Rajoy aspira a ser el candidato al poder ejecutivo para las próximas elecciones, que debido a la inestabilidad del parlamento es posible que se adelanten. Con independencia de las posturas de la baja valoración de su liderazgo, el popular persiste en su intento tenaz por acceder a una tercera legislatura como Presidente del Gobierno. Lo que sí es cierto es que ni los partidos en Estados Unidos ni en muchos otros países de Europa los candidatos a dirigir una fuerza política están sometidos a un control tan laxo por su propio partido.

The only one

La carrera política de Rajoy no es muy distinta a las de otras personalidades entre los populares
Francisco Collado Campana
miércoles, 23 de noviembre de 2016, 00:02 h (CET)
Rajoy ya ha comunicado que se presentará de nuevo como candidato para la presidencia del Partido Popular. El catch-all-party de los conservadores españoles con una estructura presidencialista y un sistema de selección de su ejecutivo configurado por los compromisarios es una de las mejores máquinas de gobernabilidad intrapartidista que existe en el sistema de partidos españoles. Su organización está dispuesta de forma que el presidente nacional dispone directamente de una gran cantidad de información y poder de decisión sobre su continuidad o no. De esta forma, sólo su decisión de abdicar en el cargo o no renovar, produce el cambio saludable de élites a nivel nacional en este grupo político.

La carrera política de Rajoy no es muy distinta a las de otras personalidades entre los populares. Lo que comenzó con un concejal en Pontevedra, pasando por distintos cargos parlamentarios tanto a nivel autonómico como nacional, culminó durante el Gobierno de Aznar en su elección como ministro. De ahí, dio paso a la pugna con Esperanza Aguirre por el liderazgo del partido y finalmente se consolidó durante la segunda legislatura de Zapatero como el indiscutible líder de la oposición.

Casi diez años después, Rajoy aspira a ser el candidato al poder ejecutivo para las próximas elecciones, que debido a la inestabilidad del parlamento es posible que se adelanten. Con independencia de las posturas de la baja valoración de su liderazgo, el popular persiste en su intento tenaz por acceder a una tercera legislatura como Presidente del Gobierno. Lo que sí es cierto es que ni los partidos en Estados Unidos ni en muchos otros países de Europa los candidatos a dirigir una fuerza política están sometidos a un control tan laxo por su propio partido.

Noticias relacionadas

Hoy quisiera invitarlos a reflexionar sobre un aspecto de la vida actual que parece extremadamente novedoso por sus avances agigantados en el mundo de la tecnología, pero cuyo planteo persiste desde Platón hasta nuestros días, a saber, la realidad virtual inmiscuida hasta el tuétano en nuestra cotidianidad y la posibilidad de que llegue el día en que no podamos distinguir entre "lo real" y "lo virtual".

Algo ocurre con la salud de las democracias en el mundo. Hasta hace pocas décadas, el prestigio de las democracias establecía límites políticos y éticos y articulaba las formas de convivencia entre estados y entre los propios sujetos. Reglas comunes que adquirían vigencia por imperio de lo consuetudinario y de los grandes edificios jurídicos y filosófico político y que se valoraban positivamente en todo el mundo, al que denominábamos presuntuosamente “libre”.

Pienso que habrá cada vez más Cat Cafés y no solamente cafeterías, cualquier ciudadano que tenga un negocio podría colaborar. Sólo le hace falta una habitación dedicada a los gatos. Es horrible en muchos países del planeta, el caso de los abandonos de animales, el trato hacia los toros, galgos… las que pasan algunos de ellos… Y sin embargo encuentro gente que se vuelca en ayudarles y llegan a tener un número grande de perros y gatos.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto