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Real Madrid y Atlético repiten en Milán la final de hace dos años
La final de los números uno (20:45, Antena 3 / beIN Sports)
Roberto Carrera Hernández |
viernes, 27 de mayo de 2016, 15:55
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Real Madrid: Keylor Navas; Carvajal, Pepe, Sergio Ramos, Marcelo; Casemiro, Kroos, Modric, Bale, Cristiano Ronaldo y Benzema.
Atlético: Oblak; Juanfran, Savic, Godín, Filipe Luis; Gabi, Augusto, Saúl, Koke; Griezmann y Fernando Torres.Y eso que hasta quince jugadores en ambas plantillas repiten dos años más tarde. Cuando el inglés Clattenburg inicie el encuentro, no será la falta de experiencia lo que pille desprevenido a ningún once. Pero en esta ocasión ambos equipos se juegan su última oportunidad de levantar un trofeo esta temporada. Así como en 2014 el Atlético llegaba como campeón de Liga y el Real Madrid como ganador de la Copa, la Champions de Milán supone ahora dejar un año para el recuerdo o abandonar 2016 sin alcanzar ninguna de las metas finales.
La presión bascula según a quién se le pregunte, pero con dos equipos acostumbrados a llenar las vitrinas parece complicado que nadie se conforme con algo menos que la victoria. Los rojiblancos han terminado por agotar esta temporada cualquier atisbo de equipo revelación que pueda suavizar un tropiezo. Su camino en esta Champions ha sido memorable, y en caso de ganarla habrán superado consecutivamente a los tres últimos campeones, una hazaña tremenda. Al Cholo se le ha visto estos días exhibiendo todas sus supersticiones de manera acelerada. El avión, la camiseta, horarios de entreno, todo con tal de que el buen fario se quede por el vestuario. Tensión que deja ver la sensación colchonera de que este debe ser el día marcado.
Enfrente su rival histórico, y el rival histórico para casi todo el mundo del fútbol. El Real Madrid ha llegado a trancas y barrancas a esta final, con unas eliminatorias poco habituales a nivel Champions y tras superar un cambio de entrenador y un periodo de malos resultados que casi terminan con la temporada en marzo. Pero los blancos en Europa van siempre un paso por delante, y los de Zidane se plantan en San Siro con toda la confianza para convertir un año mediocre en una campaña histórica.
Los dos equipos llegan con sus plantillas a tope, y solo el dibujo técnico decidirá sobre los veintidós hombres que salten este sábado al campo. Para el Cholo la duda entre Carrasco y Augusto se junta con la incertidumbre de quién acompañará a Godín en el centro de la zaga. Savic o Giménez son los candidatos.
Zidane apostará por Casemiro para imprimir carácter a un Madrid que sabe de la fortaleza física del rival. La BBC llega con un Bale desatado, un Benzema reivindicativo tras su ausencia en la Eurocopa y un Cristiano que se basta con medio combustible para ser un fastidio en área contraria. El portugués lleva tantos goles en Champions (16) como todo el Atlético.
Aunque a priori no parece que de goles vaya a ir la historia. Al menos eso dicen los dos porteros que se pondrán bajo palos: Keylor es el menos goleado de la competición (2 goles) y Oblak acaba de conseguir un Zamora histórico. Ojo también con el tiempo extra. Aún sin base científica, si lo que ha ocurrido este año con las copas nacionales en Europa (hasta cinco empates en el tiempo reglamentario) es contagioso, la prórroga no es descartable.
Ya rebosa Milán con aficionados de ambos equipos. Un estadio mítico para que todo el continente vuelva a dirigir su mirada hacia el mismo país. La primera o la undécima. Sea como fuere, España se mantiene como la número uno. Y que dure.
La final de los números uno (20:45, Antena 3 / beIN Sports) | ||||
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Y eso que hasta quince jugadores en ambas plantillas repiten dos años más tarde. Cuando el inglés Clattenburg inicie el encuentro, no será la falta de experiencia lo que pille desprevenido a ningún once. Pero en esta ocasión ambos equipos se juegan su última oportunidad de levantar un trofeo esta temporada. Así como en 2014 el Atlético llegaba como campeón de Liga y el Real Madrid como ganador de la Copa, la Champions de Milán supone ahora dejar un año para el recuerdo o abandonar 2016 sin alcanzar ninguna de las metas finales. La presión bascula según a quién se le pregunte, pero con dos equipos acostumbrados a llenar las vitrinas parece complicado que nadie se conforme con algo menos que la victoria. Los rojiblancos han terminado por agotar esta temporada cualquier atisbo de equipo revelación que pueda suavizar un tropiezo. Su camino en esta Champions ha sido memorable, y en caso de ganarla habrán superado consecutivamente a los tres últimos campeones, una hazaña tremenda. Al Cholo se le ha visto estos días exhibiendo todas sus supersticiones de manera acelerada. El avión, la camiseta, horarios de entreno, todo con tal de que el buen fario se quede por el vestuario. Tensión que deja ver la sensación colchonera de que este debe ser el día marcado. Enfrente su rival histórico, y el rival histórico para casi todo el mundo del fútbol. El Real Madrid ha llegado a trancas y barrancas a esta final, con unas eliminatorias poco habituales a nivel Champions y tras superar un cambio de entrenador y un periodo de malos resultados que casi terminan con la temporada en marzo. Pero los blancos en Europa van siempre un paso por delante, y los de Zidane se plantan en San Siro con toda la confianza para convertir un año mediocre en una campaña histórica. Los dos equipos llegan con sus plantillas a tope, y solo el dibujo técnico decidirá sobre los veintidós hombres que salten este sábado al campo. Para el Cholo la duda entre Carrasco y Augusto se junta con la incertidumbre de quién acompañará a Godín en el centro de la zaga. Savic o Giménez son los candidatos. Zidane apostará por Casemiro para imprimir carácter a un Madrid que sabe de la fortaleza física del rival. La BBC llega con un Bale desatado, un Benzema reivindicativo tras su ausencia en la Eurocopa y un Cristiano que se basta con medio combustible para ser un fastidio en área contraria. El portugués lleva tantos goles en Champions (16) como todo el Atlético. Aunque a priori no parece que de goles vaya a ir la historia. Al menos eso dicen los dos porteros que se pondrán bajo palos: Keylor es el menos goleado de la competición (2 goles) y Oblak acaba de conseguir un Zamora histórico. Ojo también con el tiempo extra. Aún sin base científica, si lo que ha ocurrido este año con las copas nacionales en Europa (hasta cinco empates en el tiempo reglamentario) es contagioso, la prórroga no es descartable. Ya rebosa Milán con aficionados de ambos equipos. Un estadio mítico para que todo el continente vuelva a dirigir su mirada hacia el mismo país. La primera o la undécima. Sea como fuere, España se mantiene como la número uno. Y que dure. |
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