Tras dos exitosas temporadas en Barcelona, con 600.000 espectadores, 84.000 cambios de vestuario…, "Grease, el musical de tu vida" abandona Bilbao, con resultado desigual, tras dos semanas y pico de actuaciones diarias en el Palacio Euskalduna.
La energía y fuerza del espectáculo no han tenido en la villa igual enganche que en la ciudad condal, pero ha habido buenas entradas en casi todas las funciones. Un género no muy estilado por estos lares, ha contado con dos espectáculos de primer nivel a la vez en el Botxo, como “Hoy no me puedo levantar” en el Teatro Arriaga y el que nos ocupa.
Así pues, la adaptación en el Euskalduna de la obra original de Jim Jacobs y Warren Casey, ha salido más perjudicada de la colisión que el espectáculo de los hermanos Cano, que ha colgado el no hay billetes todos los días, prácticamente.
El argumento de la obra es el de dos jóvenes actores desempleados que en 1971 se inspiraron en sus tiempos de estudiantes en el Instituto para crear una espectáculo teatro-musical que ha dado la vuelta al mundo. Sólo la película lleva recaudados ya alrededor de 200 millones de dólares. La banda sonora permaneció en los primeros puestos de top-ventas durante una década y canciones como "Summer nights" y "You´re the one that I want" siguen siendo coreadas y bailadas por diferentes generaciones.
Grease narra la historia de un amor de verano, en la misma época de la eclosión del rock. Danny Zucko y Sandy Olsson se enamoran durante las vacaciones de verano y se despiden pensando que nunca más volverán a verse. Pero, hete aquí que sin saberlo, acaban matriculándose en el mismo colegio. La conocida historia de amor entre los pipiolos se complica porque Zucko no quiere perder su imagen de chico duro ante sus amigos. Finalmente, su dureza no puede evitar confesar el amor que siente hacia Sandy, que a la vez evoluciona de recatada niña bien a macarrita sexy para acabar de encandilar a su chico.
La sobreactuación de los actores y el histrionismo excesivo en el escenario han contado con la comprensión y complicidad del público bilbaíno, que gozó especialmente con las canciones y bailes que popularizaran años atrás la Newton John y Travolta. Rockers, macarras chuletas, niñas traviesas y descerebramiento general, propio de la edad por otro lado, pero muy exagerado… demasiado.
Pero al César lo que es del César, más de treinta años después de su estreno, el original Grease ha sido considerado por la cadena CBS como el Mejor Musical de Todos los Tiempos; otra cosa son los sucedáneos que… sucedáneos son.
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