| ||||||||||||||||||||||
| ||||||||||||||||||||||
|
|
El acuerdo logrado en Suiza entre Irán y las cinco potencias con derecho a veto en la ONU, más Alemania, es un paso importante que puede suponer una reducción significativa del programa nuclear civil de Teherán durante una década. No obstante, los recelos israelíes son comprensibles. Es legítimo que no compartan la euforia mostrada por Barack Obama, pero deben entender también que, ahora mismo, el acuerdo es una buena opción para evitar la posesión de armas nucleares por parte de Irán y favorecer su inserción progresiva como socio fiable de la Comunidad Internacional, en un momento de tremendas convulsiones en el interior del mundo islámico.
Me ceñiré a España porque es lo que nos toca más de cerca, aunque se esté padeciendo a nivel mundial. Estamos viviendo un momento un tanto convulso e incierto políticamente, ya que se remerora un pasado cuyo final terminó como todos sabemos, mejor dicho unos cuantos, ya que una gran mayoría no tienen ni idea de lo ocurrido debido al pésimo sistema educativo que llevamos sufriendo, y como dice el dicho, quien no conoce su historia está condenado a repetir los errores habidos.
“Lo que comienza aquí cambia el mundo. Comienza contigo y con lo que haces cada día”. Así reza un cartel alentador que da la bienvenida a los estudiantes de la Universidad de Texas en Austin. Sin embargo, las acciones que ese centro educativo está llevando a cabo cuentan una historia diferente.
San Rafael Arnaiz Barón, Estudiante de Arquitectura y finalmente monje Trapense en el Monasterio de Dueñas. Falleció a los 27. Su permanente conversación con Jesús ante el Sagrario, su permanente recorrido del Vía Crucis, reviviendo los pasos de su Señor y Amigo, su constante búsqueda de la voluntad de Dios, juntamente con su fe, su esperanza y su caridad hicieron de su vida un recorrido “escondido” en Dios y un camino silencioso de enseñanza mística de Jesús.
|