La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha
asegurado que instaurar una cultura de la transparencia es a su juicio la
clave para "preservar el interés de todos y prevenir el abuso de algunos" en
la gestión de lo público, que en el futuro "ya no se va a entender" sin que
rendir cuentas a los ciudadanos.
"Es un reto inédito en la democracia", ha dicho la vicepresidenta en el
acto de constitución en el Senado de la Comisión de la Transparencia,
órgano encargado de supervisar que se cumple la ley del mismo nombre
que entró en vigor a finales del año pasado.
Sáenz de Santamaría ha destacado el derecho que tienen ahora los ciudadanos para
pedir información a las administraciones y la obligación de estas de darla, cuando la
información es "el primer elemento de la participación".
Ha asegurado que la transparencia es una obligación individual y colectiva de los
gestores públicos, pero que es necesario "ir más allá de las obligaciones e incluso de las
intenciones" y crear mecanismos de supervisión.
De ahí la constitución del Consejo y la Comisión de la Transparencia, ha añadido, cuyo
trabajo de control e impulso deben servir para que "las irregularidades sean cada vez más
la excepción y cumplir la norma, lo normal".
"De la labor de todos y cada uno depende que esta nueva etapa logre lo que muchos
reclaman, que la confianza de los ciudadanos se cimente en que las cosas se conocen bien
y en que todos rendimos cuentas de cómo gestionamos", ha concluido.
DEMOCRACIA Y LIBERTAD
La presidenta del Consejo de la Transparencia
y Buen Gobierno, Esther Arizmendi, ha
asegurado que la nueva ley introduce "un
cambio trascendente en las relaciones entre la
administración y los ciudadanos" y ha
asegurado que "democracia y libertad beben de
una misma fuente, la transparencia"
El presidente del Senado, Pío García-Escudero,
ha clausurado el acto asegurando que la
transparencia es fundamental para la
regeneración democrática, "uno de los grandes
objetivos de la presente legislatura" y ha defendido que se abran vías para "la fiscalización
social de la actividad pública".
COMPOSICIÓN Y FUNCIONAMIENTO
La Comisión de Transparencia y Buen Gobierno está compuesta por la presidenta del
Consejo, Esther Arizmendi, y los siguientes vocales: Pilar Cortés, diputada del PP; Jokin
Bildarratz, senador del PNV; María José de la Fuente, del Tribunal de Cuentas; José Manuel
Sánchez Saudinós, del Defensor del Pueblo; Agustín Puente, de la Agencia de Protección de
Datos; María Pía Junquera, de la Secretaría de Estado de Administraciones Públicas; y José
Luis Martínez Almeida, de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal. El
secretario de la Comisión es Francisco Javier Amorós, subdirector general de
Transparencia y Buen Gobierno. El acto institucional, en el que participará la vicepresidenta
del Gobierno, dará paso a la primera sesión del nuevo organismo.
El acto institucional de este lunes ha dado paso a la primera sesión del nuevo organismo,
en el que se revisará un avance del Plan Estratégico 2015-2016 y se fijará la fecha de la
siguiente reunión.
El Consejo de Transparencia y Buen Gobierno tiene como misión promover la
transparencia de la actividad pública, velar por el cumplimiento de las obligaciones de
publicidad, salvaguardar el ejercicio de derecho de acceso a la información pública y
garantizar la observancia de las disposiciones de buen gobierno. La presidenta Arizmendi y
la comisión son sus dos órganos rectores.