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El Unicaja de Málaga acabó el año de la mejor manera posible, haciendose con el pimer puesto de la ACB tras batir al Real Madrid en un encuentro que necesitó del tiempo extra para determinar su vencedor. Con esta victoria, los malagueños abren brecha de por medio en la lucha por la primera plaza y mantienen tras 14 jornadas su imbatibilidad como local.
El equipo de Pablo Laso salió mejor a pista y castigó severamente los errores de su rival, muy desacertado en la inauguración del choque, lo que se tradujo en un parcial de 2 - 7 con el que los visitantes llevaban la iniciativa del encuentro. Fran Vázquez comandó el despertar malaguista, colocando un soberano gorrazo a Gustavo Ayón y ejecutando un enorme mate sobre el mexicano para igualar las tornas.
Suárez y Maciulis se intercambiaban canastas mútuamente hasta que irrumpió la figura de Rudy Fernández con un triple y un mate tras robo para abrir brecha y forzar el tiempo muerto de Joan Plaza. El técnico catalán no halló el modo de frenar el enorme acierto exterior del Real Madrid, que continuaba martilleando la defensa malacitana con un 5/7 en triples y lograba una suculenta renta de 12 puntos para los blancos (17 - 29).
El severo correctivo recibido en el primer periodo no fue suficiente para enfriar el espíritu de lucha del equipo local. Los malagueños se mostraron más incisivos de cara a canasta de la mano de Jayson Granger, que acabaría siendo el mejor del choque con 21 puntos y 10 asistencias, mientras que el acierto del Real Madrid descendía, lo que le permitió al cuadro andaluz reducir ligeramente las diferencias en el electrónico. Un parcial de 10 - 2 acabó empañando todo el buen trabajo realizado anteriormente por los pupilos de Pablo Laso.
El Chapu Nocioni salió a pista para dar algo de oxígeno a los suyos, sumando 7 puntos desde el banquillo. Un triple con adicional de Mindaugas Kuzminskas no encontró continuidad en el juego cajista y todo apuntaba a que la diferencia se mantendría por encima de los diez puntos al llegar descanso. Pero una técnica señalada a Salah Mejri desestabilizó por completo al conjunto merengue, mientras la conexión Granger-Vázquez empezaba a hacer de las suyas para dejar todo abierto de cara a la segunda mitad (46 - 48).
El ritmo anotador bajó considerablemente tras el paso por vestuarios y ninguno de los dos equipos era capaz de anotar con facilidad. Sólo el omnipresente Rudy Fernández, máximo anotador del partido con 24 puntos, seguía viendo el aro como una piscina. El quinteto planteado sobre la pista por el Unicaja, excesivamente defensivo, no aportaba en ataque y tampoco contenía al enorme talento del equipo blanco.
La entrada a pista de Vladimir Golubovic le dio un nuevo aire a la defensa cajista y se convirtió en un verdadero quebradero de cabeza para el Real Madrid, que no encontraba la manera de evitar los enormes brazos del montenegrino en la zona. Como viene siendo habitual esta temporada, Will Thomas apareció para anotar cuando más quemaba el balón, y con un triple le apretó aún más las tuercas a su rival, pero aún así el dominio continuó siendo merengue a las puertas del cuarto periodo (57 - 62).
La vieja guardia del Real Madrid salió a escena, con los Sergios asumiendo galones mientras el Unicaja se mostraba incapaz de recortar diferencias ante su falta de acierto en el tiro exterior. Fue entonces cuando Jayson Granger sacó lo mejor de su baloncesto, inventándose un nuevo alley-hoop para Fran Vázquez y anotando un 2+1 para darle la primera ventaja en el marcador a los malagueños.
Las gradas rugían como si de un título se tratase, con los dos equipos alternando buenas acciones con errores garrafales. Los costasoleños se obsesionaban cada vez más con el triple, mientras que los de Laso perdían balones sin ton ni son. En este desconcierto general, el buen trabajo en el rebote ofensivo y el acierto en el tiro libre empezó a decantar el partido poco a poco para el lado visitante.
Cuando todo parecía perdido para los verdes, Fran Vázquez emergió una vez más como un coloso con dos nuevos machaques e igualaba la contienda a falta de 41 segundos para la conclusión del tiempo reglamentario. Una rigurosa falta de Granger le dio la oportunidad a Felipe Reyes de darle de nuevo la ventaja a su equipo, pero Caleb Green logró anotar bajo los aros y llevar así el partido a la prórroga (77 - 77).
Ya en el tiempo extra, el base uruguayo siguió luciendo su traje de super héroe durante 2 minutos más, liderando un parcial de 6 - 0 antes de cometer su quinta falta, con el que el Unicaja lograría su máxima renta en el partido. El Real Madrid no le perdió la cara al encuentro y siguió al acecho forzando faltas hasta igualar una vez más la contienda.
Una suspensión de Fran Vázquez y el acierto desde la personal de Ryan Toolson permitió al Unicaja recuperar definitivamente el mando del encuentro, el cual ya no cedería pese a un triplazo de Sergio Llull con 15 segundos por disputarse. El Madrid tiró a la basura todas sus opciones de remontada tras una antideportiva sin el balón en juego y acabó perdiéndose en un mar de técnicas que no empañaban la grandísima actuación del equipo de Joan Plaza.
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