Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | Batallas reflexivas
“Un golpe a tiempo” no es un método violento ya que no es proporcional a otras prácticas realmente violentas

Un azote reconductor

|

“Un golpe a tiempo” es un buen método de educación hacia los hijos por cuatro razones: porque se debe concebir como un recurso de última ratio, por el principio de limitación, porque el principio de proporcionalidad demuestra que no es un método violento, y para hacer efectiva una educación disciplinaria.

Hay diferentes métodos o estrategias educativas que se pueden utilizar, como por ejemplo el refuerzo positivo, el refuerzo negativo, el castigo, entre otros. En este sentido, hay que priorizar estos métodos, y por lo tanto, concibo “un golpe a tiempo” como un recurso de última ratio. En otras palabras, cuando las otras vías de educación no han dado el resultado deseado o esperado, se debe optar por esta estrategia educativa.

Continuando en la misma línea, los métodos educativos mencionados tienen un recorrido finito, es decir, el principio de limitación proclama que las diferentes estrategias educativas tienen un inicio y un final. Y por lo tanto, cuando ninguna de las anteriores ha funcionado en una circunstancia determinada, es lícito aplicar la fórmula de “un golpe a tiempo”.

Un error frecuente que se comete en este debate es relacionar el método “un golpe a tiempo” con la violencia. En este sentido, no se debe hacer esta asociación por el principio de proporcionalidad. Por ejemplo, un caso de violencia de género, basado en que un hombre maltrata de forma psicológica, ambiental y física a una mujer, sí que se debe considerar un acto violento. No obstante, este ejemplo no es nada proporcional al recurso de “un golpe a tiempo”. Y es que, no es justo equiparar unas formas de violencia intensas y repetidas en el tiempo, con un método de reacción y de educación.

Finalmente, una característica no poco común, es que muchos niños no tienen ningún respeto hacia sus padres. Una de las causas es la educación excesivamente permisiva que se basa en no poner límites. De este modo, la fórmula “un golpe a tiempo” es una manera de disciplinar el comportamiento de los hijos. En definitiva, esta estrategia permite recuperar el respeto olvidado de muchos hijos hacia sus padres.

Un azote reconductor

“Un golpe a tiempo” no es un método violento ya que no es proporcional a otras prácticas realmente violentas
Cude
viernes, 20 de septiembre de 2013, 07:41 h (CET)
“Un golpe a tiempo” es un buen método de educación hacia los hijos por cuatro razones: porque se debe concebir como un recurso de última ratio, por el principio de limitación, porque el principio de proporcionalidad demuestra que no es un método violento, y para hacer efectiva una educación disciplinaria.

Hay diferentes métodos o estrategias educativas que se pueden utilizar, como por ejemplo el refuerzo positivo, el refuerzo negativo, el castigo, entre otros. En este sentido, hay que priorizar estos métodos, y por lo tanto, concibo “un golpe a tiempo” como un recurso de última ratio. En otras palabras, cuando las otras vías de educación no han dado el resultado deseado o esperado, se debe optar por esta estrategia educativa.

Continuando en la misma línea, los métodos educativos mencionados tienen un recorrido finito, es decir, el principio de limitación proclama que las diferentes estrategias educativas tienen un inicio y un final. Y por lo tanto, cuando ninguna de las anteriores ha funcionado en una circunstancia determinada, es lícito aplicar la fórmula de “un golpe a tiempo”.

Un error frecuente que se comete en este debate es relacionar el método “un golpe a tiempo” con la violencia. En este sentido, no se debe hacer esta asociación por el principio de proporcionalidad. Por ejemplo, un caso de violencia de género, basado en que un hombre maltrata de forma psicológica, ambiental y física a una mujer, sí que se debe considerar un acto violento. No obstante, este ejemplo no es nada proporcional al recurso de “un golpe a tiempo”. Y es que, no es justo equiparar unas formas de violencia intensas y repetidas en el tiempo, con un método de reacción y de educación.

Finalmente, una característica no poco común, es que muchos niños no tienen ningún respeto hacia sus padres. Una de las causas es la educación excesivamente permisiva que se basa en no poner límites. De este modo, la fórmula “un golpe a tiempo” es una manera de disciplinar el comportamiento de los hijos. En definitiva, esta estrategia permite recuperar el respeto olvidado de muchos hijos hacia sus padres.

Noticias relacionadas

El cisne negro de Biden sería la protesta de los estudiantes universitarios contra la invasión de Gaza en las Universidades de Columbia y la UCLA y su violento desalojo por la policía, movimiento de protesta que por mimetismo podría extenderse al resto de Universidades de Estados Unidos, rememorando las protestas de 1968 contra la guerra de Vietnam.

Un 14 de mayo de 1935 el Comité Pro-Paz en América advertía que la guerra del Chaco era una amenaza para la democracia en todo el continente. Este comité se había constituido en la ciudad argentina de Córdoba, y lo integraban poetas e intelectuales de varias nacionalidades.

El presidente Sánchez ha hablado estos días de la necesidad de un plan de regeneración democrática, que considera “uno de los desafíos más trascendentes”, para lo que propondrá “medidas y acciones para reforzar y prestigiar la democracia”. Pero ¿de qué regeneración democrática hablamos?

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto