Alonso sufrió las arbitrarias decisiones de la FIA y una mala estrategia de equipo. De la Rosa puntuó pero fue penalizado y Alguersuari no encontró el ritmo en todo el fin de semana.

Calamidad para Fernando
Si algo positivo se saca del fin de semana de Fernando, es que su montura, el F10B, es eficaz y han recortado distancias con McLaren y Red Bull. Esto sería una buena noticia de no haber mediado las inoportunas decisiones arbitrales de la FIA, que dieron al traste con una carrera en la que se pudo haber conseguido un buen botín de puntos y que desgraciadamente acabó con Alonso furioso y unos raquíticos cuatro puntos en la bolsa.

El fin de semana no empezó mal para el asturiano, evidenciando la mejora de la nueva especificación e ilusionando a los ‘tifossi’ que soñaban con reverdecer laureles en tierras valencianas. La euforia finalmente se desató cuando Fernando realizaba una salida espectacular y se colocaba tercero en la primera curva. A partir de ahí la estrategia era clara: sólo quedaba presionar a Hamilton e intentar adelantarlo en el pit-stop. El piloto de McLaren, como consecuencia de un toque con Vettel, tenía el alerón delantero destrozado y perdía tiempo en cada sector.

Sin embargo, en F1 la planificación sirve de poco y Webber reventaba todos los cálculos al impactar brutalmente con el Lotus de Kovalainen. Este incidente provocaba la salida inmediata del ‘Safety Car’, con tan mala fortuna que Hamilton, Alonso y Massa se veían retenidos por éste. Hamilton, violando el espíritu de la norma y la norma misma, adelantaba al coche médico y al ‘Safety’ mientras Alonso y Massa se quedaban detrás. Lewis pudo hacer esa vuelta a ritmo de carrera y así no perder tiempo con Vettel, que había pasado antes de la salida del Safety’.

Aún así la calamidad no terminaba para el equipo del ‘Cavallino’ y en una decisión estratégica muy desafortunada metían a Alonso y Massa en el box, cuando el F10 podía haber soportado otras diez vueltas con las blandas y cambiar así la estrategia en el momento, parcela en la que Ferrari no sobresale precisamente. El resultado fue que Alonso salió en P10 en un circuito en el que adelantar es poco menos que una quimera.

El asturiano, furioso con la maniobra de Hamilton, pedía desde su radio que se investigara la maniobra y penalizaran al reincidente infractor. Sin embargo la decisión de la FIA llegó tarde y mal, dando tiempo a Hamilton a que se distanciará de su inmediato perseguidor, un sorprendente Kobayashi. El ‘drive through’ fue un castigo nimio e ineficaz para la infracción tan grave cometida y Hamilton logró mantener su segunda posición, mientras que Alonso se hundía en la tabla, incapaz de adelantar con sus neumáticos duros de 40 vueltas a Buemi. El colofón de un fin de semana para olvidar fue el adelantamiento de un kamikaze Kobayashi a escasas vueltas del final.

Sin recompensa para Pedro
El fin de semana de Pedro fue de menos a más. El viernes y el sábado el C29 se mostró como habitualmente, lento y sin carga como para afrontar las curvas rápidas con seguridad. El trabajo del de Cardedeu fue intenso y el sábado logró pasar la Q1 gracias a una vuelta extraordinaria. Su compañero, por contra no era capaz.

Sin embargo el domingo todo cambió, y es que aún siendo un monoplaza terrible, las manos de Pedro y un buen ritmo en tandas largas hacen que, si no se rompe, el Sauber sea capaz de rodar en los puntos. La carrera fue intensa y el español, que no se pudo beneficiar del ‘Safety’, siguió la estrategia más o menos lógica. Blandas en la salida y cambiar rápido a las duras confiando en el buen trato de las gomas en tanda larga. Así su ritmo fue suficiente para mantenerse a las puertas del tan ansiado décimo puesto, que logró conquistar cuando Hülkenberg se retiró.

Al bajar del monoplaza Pedro se mostraba exultante y contento, más por el reto personal de puntuar que se había marcado que por el punto, que a la postre y nuevamente en una polémica decisión de la FIA, le retiraron por exceder el límite de velocidad con el ‘Safety’ en pista.

Aprendizaje para Jaime
El único piloto español al que las decisiones de la FIA no le afectaron también fue el más discreto. Y es que Jaime estuvo todo el fin de semana detrás de su compañero Buemi, al que el toque de atención desde la escudería parece haberle dado la velocidad que había perdido. Jaime se mostró consistente en tandas largas, pero sin embargo en la clasificación le costó sacar el rendimiento al STR, lo que lo condenó al fondo de la tabla el sábado, logrando, eso sí, pasar la Q1.

En carrera el ‘Safety’ condicionó los resultados y el ritmo de Jaime, que rodó gran parte de la carrera manteniendo a raya a Michael Schumacher y a menos de un segundo de Massa, fue bueno. No obstante, durante todo el fin de semana los frenos y el ángulo de las curvas lentas fueron un quebradero de cabeza que el catalán no pudo solventar, quedando el decimoquinto en la tabla final.