
El movimiento feminista de Pamplona ha reclamado este lunes "más políticas preventivas" a las instituciones para disfrutar de las fiestas "en libertad y sin miedo" y ha considerado que el protocolo de agresiones sexistas en fiestas "no es suficiente". En este sentido, ha puesto en valor el "rechazo social" a las agresiones sexistas y ha defendido el papel de los hombres para conseguir un "cambio radical del sistema patriarcal".
Así lo han indicado María Palacios y Amaia Zubieta, en representación del movimiento feminista, en una comparecencia en la que han hecho balance de los Sanfermines de 2025. Unas fiestas en las que se han registrado una agresión de alta intensidad y 10 más de baja intensidad, comunicadas al Ayuntamiento de Pamplona y en los canales del movimiento feminista, sin bien han asegurado que "son muchas más, ya que hay mujeres que por circunstancias personales ni denuncian, ni solicitan asistencia o ayuda".
Zubieta ha reconocido que con el protocolo "ha habido un cambio sustancial" contando en la actualidad con el Centro de Atención Integral para las Agresiones Sexuales, aumentando las horas de atención de la caseta informativa de la Plaza del Castillo y realizando campañas preventivas. No obstante, ha indicado que, al pedir más recursos, no se centran solo en el entorno festivo, porque las agresiones "se dan durante todo el año". Así, ha explicado que "hay listas de espera" en la atención psicológica y legal, para la cual hace falta más recursos".
En el marco de la fiestas, ha opinado que "el ámbito preventivo es el más importante" a nivel educativo, no solo en el entorno escolar sino también desde el punto de vista social. Igualmente, ha destacado la responsabilidad de los medios de comunicación en cuanto a "cómo se dan los mensajes" para que no haya una "revictimización".
Amaia Zubieta ha considerado que se ha conseguido presentar las fiestas de San Fermín como un "paradigma del rechazo social a las agresiones sexistas" y ha afirmado que, en este camino, el movimiento feminista "hemos sido un referente". En la misma línea, María Palacios ha resaltado el "paso adelante" en cuanto a la respuesta ciudadana a las agresiones y ha indicado que "hay mucha gente muy pendiente ante situaciones de riesgo, no se suele mirar a otro lado".
"UNAS FIESTAS CON AGRESIONES NO SON UNAS FIESTAS IGUALITARIAS"
Palacios y Zubieta han leído, en castellano y euskera, un comunicado en el que han remarcado que "unas fiestas con agresiones no son unas fiestas igualitarias, son unas fiestas marcadas por la sociedad patriarcal en la que vivimos". "Las fiestas no son un contexto aislado donde el alcohol y la desinhibición marcan una excepcionalidad, sino que son un reflejo más de la realidad en la que vivimos y por tanto, se reproducen los mismos comportamientos", han defendido.
Han destacado que "las agresiones sexistas son actos injustificables" y "no cabe especular ni cuestionar a las víctimas sobre sus comportamientos". Y han subrayado que "el rechazo firme a las agresiones sexistas debe ir acompañado de un apoyo y una protección a las mujeres que han sufrido estas agresiones y a su entorno".
Han valorado que "hoy se cuenta con un protocolo, se han conseguido mejoras asistenciales, con servicios públicos multidisciplinares de atención y recuperación integral". A su vez han resaltado que "hemos conseguido leyes que no cuestionen el relato de las mujeres", en referencia a la conocida como 'Ley de solo sí es sí' y han destacado que "el rechazo social ante las agresiones ha aumentado".
Sin embargo, han considerado que "no es suficiente porque siguen agrediéndonos y matándonos". Por ello, desde el movimiento feminista han demandado "más políticas preventivas a las instituciones, porque no vale solo con poner la tirita en la herida, lo que necesitamos es un cambio radical del sistema patriarcal". Algo que "solo se dará si contamos con una sociedad comprometida que plante cara al machismo, donde todos los hombres que dicen ser aliados den el paso de renunciar a sus privilegios y acabar con las complicidades, plantando cara a amigos, hermanos y vecinos que muestran comportamientos machistas". Los hombres "son los que tienen que protagonizar el cambio", han recalcado.
El movimiento feminista ha señalado que "nos mantendremos alerta, para mejorar lo conseguido y que no se de ni un paso atrás". "La sombra de la ultraderecha y del fascismo está cada día más presente con sus discursos negacionistas, y todos y todas debemos estar dispuestas a plantar cara y combatirlo", ha reivindicado.
"No vamos a consentir que las agresiones machistas se normalicen en entornos festivos. Son violencias que nos afectan a todas las mujeres, no solo a quienes la padecen. Condicionan la libertad de participación del 50% de la población, las mujeres, negándonos disfrutar del ocio festivo en libertad y sin miedo", ha censurado. Al respecto, desde el movimiento han manifestado que "estamos organizadas y vamos a seguir saliendo, bebiendo, bailando y luchando".
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