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El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha denunciado este jueves un nuevo ataque de las Fuerzas Armadas de Rusia sobre instalaciones civiles, en esta ocasión dos edificios de la administración regional de Jersón, que ha sufrido estos bombardeos por segundo día consecutivo hasta quedar destruidos "por completo". "Ataques selectivos, no aleatorios. Sin sentido militar. Francamente, están destruyendo vidas. Son seres completamente enfermos", ha lamentado el presidente ucraniano en sus redes sociales, desde donde ha apelado nuevamente a la necesidad de responder con la fuerza "para obligarles a dejar de matar". Zelenski ha asegurado que "es obvio quién tiene exactamente ese poder", que está a la espera de ser utilizado para la "paz", en una alusión a socios como Estados Unidos, a los que ha pedido de manera reiterada que aplique nuevas sanciones contra Rusia a fin de que avancen las negociaciones comenzando por un alto el fuego. "Desafortunadamente, no lo hacen", ha dicho el mandatario, que, por otro lado, ha agradecido a quienes sí "están ayudando para cambiar eso" y ofrecen "seguridad real" al pueblo ucraniano. El gobernador de la provincia, Oleksander Prokudin, ha informado de que todavía están investigando el alcance del ataque y la posibilidad de posibles víctimas. En las últimas horas, las autoridades ucranianas han informado de que al menos cuatro bombas guiadas han caído sobre el centro de Jersón, dejando varios heridos.
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