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El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha condenado los últimos ataques lanzados por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) sobre Siria ya que representan "una violación de la soberanía", en plena escalada de la violencia sectaria entre la comunidad drusa y milicias afines a las actuales autoridades sirias. "Es esencial que cesen estos ataques y que Israel respete la soberanía, la unidad, la integridad territorial y la independencia de Siria", ha reclamado Guterres a través de su portavoz, Stéphane Dujarric, horas después de que el Ejecutivo israelí reconociese un bombardeo en las inmediaciones del palacio presidencial de Damasco. Las autoridades de Israel justifican esta nueva ofensiva apelando a la protección de la minoría drusa en Siria, después de unos enfrentamientos que Guterres sigue también "con alarma". El máximo responsable de la ONU ha expresado su preocupación por cualquier acto que pueda alentar la violencia sectaria y ha instado a todas las partes a actuar con "máxima contención". Guterres ha reconocido los esfuerzos internos por contener la escalada y "mantener la seguridad y la estabilidad", por lo que toma nota también de los mensajes del Gobierno de Ahmed al Shara en favor del diálogo. Naciones Unidas espera que las autoridades provisionales investiguen con "transparencia" cualquier posible abuso.
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