Felizmente finalizado el secuestro de Albert Vilalta y Roque Pascual, quienes llevaban 267 días en manos de Al Qaeda; puesto como ejemplo ante los franceses el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero por los terroristas y enfadadísimo, con razón, Nicolás Sarkozy; conocedores de que el pago de rescate va a provocar numerosos secuestros y asesinatos de inocentes, cuya sangre manchará la conciencia y algo más de ZP y los suyos; puestos en la diana los cooperantes y misioneros españoles serios de todo el planeta, conviene meditar acerca del papelón que ciertas, llamadas O-ene-gés andan haciendo allende nuestras fronteras. Profesionalidad nula, riesgo elevadísimo. Ayuda a los necesitados casi cero. Gorroneo, al por mayor.

Me cuentan y yo cuento que “Barcelona Acción Solidaria” no es más que una especie de chiringuito del PSC-PSOE destinado a que niños bien con mala conciencia del régimen catalán se peguen en verano un viajecito presuntamente “solidario” y muy molón. Ignoran o desprecian estos parásitos que la solidaridad para serlo debe de ser voluntaria, libre, potestativa, opcional. No tienen en cuenta que el dinero que utilizan y malgastan en irse por ahí de juerga –aunque en esta ocasión la jarana a punto estuviera de acabar en terrible tragedia- sale de lo por el gobierno previa y coactivamente expropiado a los contribuyentes. Anuncian, tócate las napias, los (ir)responsables de “Barcelona Acción Solidaria”, ONG a la cual pertenecen los liberados y que ofrece a través de su página web “turismo gratis para ricos” en la senegalesa “Maison du Gouverneur”, 3 habitaciones, 2 de ellas “suites”, baño completo… que el año que viene, serán frescos, van a volver a “correr riesgos”. A costa del bolsillo de los demás. Faltaría. Lo de esta gente, por mucho que lo disimule o se lo repita a sí misma para autoconvencerse, no es solidaridad. Es jeta, caradura, desvergüenza, sablazo, socialismo.

Conviene, por otro lado, dejar claro que el lugar en el cual fueron secuestrados los presuntos cooperantes, un poco más y se nos llevan como rehén a la señora del alcalde de Barcelona, a medio ayuntamiento y a algún secretario de estado de ZP que acababa de pasar poquito antes por el lugar del crimen y que participaban en la llamativa caravana rodada, había formado parte de la habitual ruta del histórico Rally Paris-Dakar. Rally suspendido en 2008 y trasladado a Sudamérica precisamente por miedo de sus responsables, estos sí, al terrorismo de Al Qaeda, que tiene tomada la zona.

Vamos, que lo de estos progresistas, laicos, pijos y subvencionados tontainas, padres intelectuales de la denominada “generación ni-ni”, es de una imprudencia y una temeridad que clama al cielo. Tanto que, como se corresponde en derecho civil a las negligencias, deberían de asumir la responsabilidad pecuniaria derivada de sus actos. Porque… señores progresistas, no pretenderán ustedes que los parados, las asfixiadas clases medias, los trabajadores, los mileuristas, los pensionistas… paguen vía presupuestos el dinero desembolsado a causa de su atolondramiento ¿verdad? Digo yo que no querrán ser así de insolidarios. No hace falta que contesten. Sabemos cómo son.

Puestos ya en libertad los retenidos, recibidos a bombo y platillo por el régimen catalán, debería el gobierno pasar la factura de su imprevisión a “Barcelona Acción Solidaria”. Es decir, que estos niños bien paguen de su bolsillo el millonario, infame y delincuescente rescate. O si no, que le pasen la minuta al PSC. Que para el caso, es lo mismo que la ONG, sin N y con mucha G.

Y en caso de negarse a pagar, debería la Justicia poner a toda esta cuadrilla de pijiprogres insensatos a atender ancianos, ayudar en hospitales, centros de DIA, colaborar en la rehabilitación de toxicómanos…, es decir, a ser de verdad útiles para la sociedad, hasta devolver hasta el último euro de lo que su temeridad ha costado.

Lo mismo así aprendían la lección y dejaban, para la próxima vez, esto de la misericordia en manos de quienes realmente la practican. Y, encima, no podrían rechistar sin quitarse la careta.