No hay duda de que la religión que más adeptos tiene es el papanatismo. Basta que un indocumentado, político, periodista o famosillo de relumbrón y papel cuché diga una sandez o se le ocurra pronunciar, sin ton ni son, un palabro que se le ha venido a la mente, o diga un barbarismo, este, en algunos casos, sin saber su significado, para que los papanatas, irreflexivos, atolondrados y sin base alguna, lo repitan por mimetismo hasta la saciedad, y llevados por la inercia, facilona y ramplona lo repitan hasta la saciedad y se imponga como una infección del lenguaje, enfermando nuestro bello idioma con pústulas, los extranjerismos, en desdoro de nuestra incomparable lengua en la que se han expresado los mejores escritores de la Humanidad.
Desconozco a quién se le ocurrió por primera vez la locución "sí o sí" que no tiene sentido, ni fundamento.
La conjunción disyuntiva o, separa, desune, aísla dos términos opuestos. Esta locución no es propia para reforzar una aseveración que es lo que los papanatas pretenden.
Si el hablante desea manifestar que algo ocurrirá sin que nadie pueda impedirlo, hay múltiples expresiones para expresarlo.
V. G.: "Pedro irá al cine, sí o sí", es sustituible por "Pedro irá al cine sin falta, sin dudarlo, sin remedio...et., etc.". Como este ejemplo, hay multitud de expresiones en las que el mimetismo y la papanatería campan a sus anchas enarbolados por pamplinosos sin remedio. El mismo caso se da con los barbarismos.
Admito y me parece laudable que se emplee una palabra de otra lengua cuando no exista otra igual o similar en la nuestra. Se hispaniza y se une al acervo de nuestro léxico, aumentando su riqueza de vocabulario. Pero es una aberración lingüística emplear una expresión extraña a nuestro glosario, cuando ya tiene carta de naturaleza y no hace falta. Espiguemos algunas de estas palabras como ejemplos de lo que no se debe de hacer para evitar la profanación innecesaria de nuestro hermosa habla. Veamos algunos ejemplos de barbarismos superfluos:
Anglicismos:
Se ha puesto de moda emplear la palabra inglesa look, para decir aspecto, imagen o figura y así se dice: “Hoy tienes un look muy bueno, por hoy tienes un aspecto, una imagen, una figura, una pinta muy bueno/a.
Otro tanto ocurre con email. Esta es la abreviatura de electronic mail, en lugar de decir correo electrónico y, dado que hoy apenas se usan cartas ológrafas, con decir simplemente: “mándame un correo para que…”, es suficiente.
Sigamos con alguna más:
Stop, por alto, pare, quieto… Parking, por aparcamiento Show: espectáculo, función Hobby: afición, pasatiempo, entretenimiento…
Es innecesario relacionar todos los extranjerismos que se usan, no solo ingleses, sino también franceses e italianos, pero sí conveniente conocer el lugar que el español ocupa en el mundo.
El Español es la segunda lengua materna del mundo por número de hablantes nativos, solo superada por el chino mandarín. Si se incluyen los hablantes con dominio nativo, limitado y los estudiantes de español, se estima que hay más de 599 millones de hispanohablantes en el mundo, lo que la sitúa como la cuarta lengua más hablada en el cómputo total, después del inglés, el chino mandarín y el hindi.
Por presencia geográfica: Es lengua oficial en veintiún países repartidos principalmente en América y España, pero también con presencia significativa en África (Guinea Ecuatorial) y Filipinas.
En internet: Es la tercera lengua más utilizada, después del inglés y el chino. También tiene una presencia importante en las redes sociales y en grandes plataformas digitales.
Su Importancia cultural y económica le asigna un gran peso cultural a nivel mundial y es una lengua de creciente importancia en el ámbito económico y comercial. La comunidad hispanohablante representa un porcentaje significativo del PIB mundial.
Hoy es la cuarta lengua más estudiada en el mundo y la más aprendida como lengua extranjera en Estados Unidos.
¿Qué ocurre pues para que el Español sea desdorado y postergado? La respuesta es muy simple, por esnobismo (de snob, sine nobilitate), e inercia, se repiten palabras no necesarias, porque nos están bombardeando con ellas los políticos, los periodistas y cualquiera de otro oficio cara al público, sin pararse a pensar que lo que se consigue es lesionar al Español.
|