Miles de personas convocadas por las diferentes plataformas de las Marchas de la Dignidad han rodeado este sábado varios parlamentos autonómicos para reclamar "pan, trabajo y techo" ya que consideran que estas cámaras legislativas son, "al igual que el Gobierno del Estado, cómplices y partícipes en las medidas de austeridad" y de "supresión de derechos y libertades".

El Movimiento 22-M, que el 22 de marzo reunió a miles de personas en el centro de Madrid para pedir el fin de los recortes y la dimisión de Gobierno y denunciar una situación de "emergencia social", había animado a los ciudadanos a protestar de esa manera en las 17 comunidades autónomas.

Las Marchas de la Dignidad han expresado su rechazo a los "recortes sociales", la "supresión de derechos y libertades ciudadanas", las privatizaciones en el sector público, la "represión" de las protestas ciudadanas, la corrupción política y empresarial, la reforma laboral y el pago de una deuda "ilegítima".

Además, han defendido unas pensiones públicas "dignas", el cuidado de las personas dependientes, el derecho a una renta básica y un empleo digno, el derecho a la vivienda, la sanidad y la educación, una justicia "gratuita y universal" y el aborto "libre y gratuito".

En Sevilla, miles de personas han rodeado el Parlamento andaluz para expresar su descontento con los políticos y también han rechazado las políticas del Gobierno autonómico, ya que "no pueden decir que son de izquierdas y hacer políticas de derechas, siguiendo a la troika".

En Santiago de Compostela, unas 2.000 personas han realizado una cadena humana alrededor del Parlamento de Galicia para manifestar que esta institución ya no les representa y reclamar que vuelva a ser "una herramienta al servicio de la ciudadanía".

Protestas junto a las sedes de los Gobiernos
Tanto en Barcelona como en Zaragoza, los manifestantes han rodeado las sedes de los respectivos gobiernos autonómicos. En la capital catalana, unas 800 personas según la Guardia Urbana, miles según la organización, han recorrido el centro y han acabado en la plaza de Sant Jaume.

Mientras, cerca de 2.000 personas, según los organizadores, han rodeado el Edificio Pignatelli en la capital aragonesa para rechazar las políticas de recortes y para reclamar trabajo digno, vivienda y servicios públicos para todos.

En Valencia, con la cadena humana formada alrededor de las Cortes se ha pedido un cambio en la institución, que, según los manifestantes, tiene "las bancadas llenas de corruptos" y ha desarrollado políticas "agresivas contra el pueblo valenciano".

Además, unas 300 personas han participado en una sentada frente al Parlamento vasco para solicitar a los políticos medidas acordes a la situación actual de pobreza que, a su entender, padece la ciudadanía vasca, con consecuencias como la malnutrición de algunos niños y la exclusión social de pensionistas, parados y mujeres.

En torno a las Cortes de Castilla y León, más de medio millar de personas, según fuentes policiales, han participado en una manifestación en la que se ha "abrazado" el edificio. Los participantes han advertido así de que el pueblo es soberano y de que vigila "todas" las decisiones que se toman en su nombre en el seno del Gobierno regional, al que consideran un "mero transmisor" de decisiones injustas del Ejecutivo central.

En Toledo, cientos de personas han realizado una marcha que ha finalizado con la entrega de sus reivindicaciones en las Cortes de Castilla-La Mancha, entre las que se incluye la retirada de la reforma de la Ley Electoral de la comunidad autónoma.

Igualmente, alrededor del Parlamento de La Rioja unas 200 personas han formado una cadena humana tras recorrer las calles de Logroño para transmitir su demanda de que se ponga fin al "atropello de la dignidad colectiva".

Apoyo de partidos, organizaciones sociales y sindicatos
Estos actos de protesta, que han sido pacíficos y se han desarrollado sin incidentes, han contado con la participación y el apoyo de decenas de organizaciones sociales y sindicales, como Stop Desahucios, CGT, CNT, el Sindicato Andaluz de Trabajadores, los 'yayoflautas', la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, distintas mareas, asambleas del 15-M, colectivos de parados y movimientos feministas.

Asimismo, se han sumado representantes de partidos como Izquierda Unida, Equo, Podemos, Bloque Nacionalista Galego, Alternativa Galega de Esquerda, ICV, EUiA, CUP y Chunta Aragonesista, entre otros.