Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas

La responsabilidad es de todos

Decir que estamos peor que nunca es marcar el kilómetro cero de la desmemoria
Mario López
sábado, 25 de agosto de 2018, 11:00 h (CET)

Hace ya más de ocho meses que no escribo; los médicos y los hospitales tienen la culpa, o seré yo que no me cuido; en estos tiempos cabe todo para explicar nada. El caso es que tampoco me lo ha puesto fácil el mundo en general y España en particular. Es tal el ritmo en el que se suceden los acontecimientos que a gente como yo, no especialmente rápida, se nos hace necesario un tiempo (cada vez más largo) para entender medianamente lo que sucede e intentar analizarlo. En principio, por encima de lo que sucede, que es tela marinera, tenemos que observar la actitud que el público en general adopta ante los acontecimientos que hacen que el mundo se mueva.


En primer lugar, todo el mundo (es un decir) reclama toda la transparencia del mundo a sus representantes. Correcto, la transparencia es basa y fundamento de cualquier régimen democrático. ¿Pero qué hace todo el mundo (es un decir) a la hora de practicar la transparencia? Pues nada, ocultarse en el anonimato de los foros para poner a caldo al primero que se le pone por medio o crearse un autorretrato virtual que ya quisiera para el Dorian Gray.

En segundo lugar, ni se quiere aprender de la Historia, ni de la historia reciente. Los cambios que se han producido en el mundo, y en España en particular, de unos cuatro años para acá, en lo político, social y en derechos humanos es impresionante. Pues nada, los hay que dicen que estamos peor que nunca, marcando el kilómetro cero de la desmemoria histórica.

Se ha avanzado mucho a la hora de poner de manifiesto los abusos y delitos de las élites. Queda muchísimo más por hacer, pero no perdamos la cabeza. El orden (o desorden) financiero mundial sigue sin tener un pase, las desigualdades son obscenas. Pero, si queremos solucionarlo, tenemos que tener siempre presente los logros alcanzados, no desfallecer y crecer. Alimentémonos con nuestras pequeñas victorias que tanto nos han costado y con la utopía, pródigo horizonte cargado de futuro. 

Noticias relacionadas

En tiempos de oscuridad interior, cuando la depresión parece borrar los colores de la vida, cuidarse puede sonar casi imposible. Sin embargo, esos pequeños gestos cotidianos de autocuidado se convierten en actos de resistencia: una manera de decirle a la tristeza que no tiene la última palabra.

Algo se quiebra dentro cuando se apaga la voz de quien te cantó al oído los secretos de la juventud. No es solo la tristeza por la desaparición de la persona, por Manuel de la Calva; es la certeza de que una parte irrecuperable de tu biografía, de nuestra biografía colectiva, se desvanece para siempre.

Se entiende por matricidio a la acción de asesinar a la propia madre, ya sea por la hija o el hijo. En el ensayo Tótem y tabú, S. Freud propone al parricidio como el mito del origen de toda la humanidad, crimen primigenio que es la principal fuente del miedo y del sentimiento de culpa.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto