MADRID, 10 (SERVIMEDIA)
Plan International reclamó este jueves que los servicios de salud mental formen parte central de la respuesta integral a la guerra en Ucrania y que, en este punto, se preste especial atención a las necesidades de adolescentes y varones jóvenes, de cara a la conferencia sobre la reconstrucción de Ucrania que se celebra en Roma.
En un informe publicado hoy bajo el título 'Heridas Invisibles: abordando los desafíos de la salud mental y el apoyo para adolescentes y hombres jóvenes ucranianos', Plan International analiza los obstáculos sociales, económicos y culturales que impiden esta atención.
El trabajo alerta sobre cómo los desplazamientos forzados, los estereotipos de la masculinidad tradicional y los elevados costes de estos servicios impiden que muchos jóvenes puedan acceder a servicios críticos para su salud mental.
Apunta que los chicos jóvenes "se enfrentan a una creciente presión para asumir nuevas responsabilidades dentro de sus familias y comunidades, asumiendo el rol de proveedores en ausencia de sus padres o familiares varones adultos".
Según el informe, "el peso de estas expectativas y la inestabilidad provocada por la guerra han dejado a muchos en una situación vulnerable e incapaces de buscar ayuda.
Un chico de 15 años entrevistado para el estudio declaró: "Son mis problemas, tengo que resolverlos yo solo". "Ir al psicólogo no es algo habitual aquí, en Ucrania, la gente lo percibe como algo extraño", corroboró otro joven de 25 años.
CONCLUSIONES
La mayoría de los encuestados ucranianos afirmaron que el estigma que rodea a la salud mental en su cultura de origen dificulta la búsqueda de atención especializada. De hecho, casi la mitad expresó su temor a ser juzgados. Más de la mitad también admitieron que, simplemente, desconocían los servicios disponibles.
Además, la guerra en curso ha profundizado las tensiones sociales entre quienes sirven en el ejército y quienes permanecen como civiles. Muchos hombres se alistaron voluntariamente, pero otros solicitaron prórrogas o han abandonado el país. Esto puede ser particularmente difícil de sobrellevar para los hogares que han perdido a miembros en combate, ya que el dolor y la frustración intensifican las divisiones sociales.
El informe también advierte que los niños y jóvenes de grupos marginados, como la comunidad romaní, que a menudo carecen de documentación oficial, enfrentan barreras adicionales que limitan su acceso a la atención médica y otros servicios.
Los jóvenes Lgtbiq+ también sufren mayor discriminación, lo que hace que sean particularmente reacios a buscar apoyo de salud mental.
Sin acceso a un apoyo especializado, algunos adolescentes y jóvenes recurren a mecanismos de afrontamiento del trauma perjudiciales, como el consumo de sustancias o conductas de riesgo.
Muchos jóvenes que han huido del país luchan por encontrar un sentido de pertenencia, agregó la ONG. Tanto ellos como los que permanecen en Ucrania lidian con la culpa del superviviente, prosiguió, además de las presiones financieras y emocionales en sus casas.
Según el estudio de Plan International, "el sufrimiento psicológico no abordado puede perpetuar ciclos de violencia y exclusión social". "Los niños que no reciben apoyo son más propensos a aislarse emocionalmente, a tener dificultades en sus relaciones y, en algunos casos, a adoptar comportamientos nocivos", alertó.
|