MADRID, 09 (SERVIMEDIA)
El secretario general de la ONU, António Guterres, señaló este lunes que "las profundidades marinas no pueden convertirse en el 'salvaje Oeste'" y lamentó que "el océano está atrapado en un círculo vicioso: es, a la vez, víctima y acelerador del cambio climático".
Guterres hizo esas consideraciones en la inauguración de la III Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos, se celebra hasta este viernes en Niza (Francia) con uno de los focos principales centrado en incrementar el respaldo de los países al Tratado Global de los Océanos.
El titular de Naciones Unidas apuntó que el océano produce la mitad del oxígeno que se respira, alimenta a unos 3.000 millones de personas y sustenta a otros 600 millones, la economía oceánica se ha más que duplicado en 30 años y el transporte marítimo representa más del 80% del comercio mundial. "El océano es nuestro bien común supremo", resumió.
Sin embargo, añadió: "Estamos fallando". "Las poblaciones de peces están colapsando. El consumo excesivo y la pesca ilegal están llevando a las especies al borde de la extinción. Cada año, se vierten 23 millones de toneladas de plástico en las aguas, sofocando los ecosistemas. Las emisiones de carbono están provocando la acidificación y el calentamiento de los océanos, destruyendo los arrecifes de coral y acelerando el aumento del nivel del mar", apuntó.
Guterres recalcó que, si no se cambia de rumbo, esta situación "sumergirá deltas, destruirá cultivos y sepultará costas, amenazando la supervivencia de muchas islas".
"El océano está atrapado en un círculo vicioso: es a la vez víctima y acelerador del cambio climático rompiendo las cadenas alimentarias, destruyendo los medios de vida, aumentando la inseguridad. Esta inseguridad se ve agravada por la delincuencia: la piratería, la trata de personas, el crimen organizado y el saqueo de recursos roban vidas, obstaculizan el desarrollo y privan a las comunidades costeras de sus derechos", apostilló.
AVANCES DESDE 2025
Por otro lado, Guterres subrayó que la minería de aguas profundas plantea "nuevos desafíos" para los países. "Las profundidades marinas no pueden convertirse en un 'salvaje Oeste'", sentenció.
No obstante, apuntó que desde la II Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos, celebrada en Lisboa (Portugal) en 2022, se han producido "avances", sobre todo la "creciente conciencia sobre la profunda interconexión entre la preservación de la biodiversidad y los ecosistemas marinos, la lucha contra el cambio climático y la lucha contra la contaminación".
A finales de 2022 se adoptó el Marco Mundial para la Diversidad Biológica Kunming-Montreal con el compromiso fundamental de conservar y gestionar al menos un 30% de las zonas marinas y costeras para 2030.
Igualmente, el Tratado Global de los Océanos se abrió a la firma de los países en septiembre de 2023 y cuenta con 32 ratificaciones, entre países y la UE, mientras se espera que en Niza suba esa cifra.
"Hago un llamamiento a todos los países para que acuerden este año un tratado ambicioso y jurídicamente vinculante sobre la contaminación por plásticos", añadió Guterres.
El secretario general de la ONU consideró que, pese a los "tiempos turbulentos" actuales, la situación de los océanos puede revertirse y expresó estos deseos: "Que podamos sustituir el saqueo por la protección, la exclusión por la equidad y la sobreexplotación a corto plazo mediante una buena gestión a largo plazo".
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