El conejo de monte pierde un 18% de su población en el sur de España y Portugal desde 2009

MADRID, 01 (SERVIMEDIA)

Las regiones españolas de Andalucía, Castilla-La Mancha y Extremadura, y Portugal al completo han perdido casi un 18% de las poblaciones de conejo de monte desde 2009.

Así se desprende del primer censo ibérico del conejo de monte, elaborado por LIFE Iberconejo con un mapa de abundancia de la especie a una escala sin precedentes. Los resultados, dados a conocer este lunes, se deben a un trabajo en el que participaron personal de administraciones públicas, científicos y personas voluntarias de los sectores de la caza y el ecologismo.

Ese pequeño animal tiene una enorme relevancia ecológica y socioeconómica, pues está considerado un 'ingeniero del ecosistema' por su capacidad para modelar el entorno y ser presa de más de 40 especies de mamíferos y aves en el monte mediterráneo. Además, es la principal pieza de caza menor y el vertebrado salvaje que más daños agrícolas provoca en España.

El análisis de capturas cinegéticas muestra que las poblaciones de conejo de monte se redujeron un 17,6% entre 2009 y 2022, con diferencias entre paisajes agrícolas (-10,17%) y de monte (-57,75%).

Los cambios en los usos del suelo -con la desaparición del paisaje tradicional en mosaico- y las enfermedades son los factores que se vinculan al descenso de las poblaciones del conejo de monte.

"Aunque las estadísticas cinegéticas tienen limitaciones, permiten obtener una visión global sobre la situación de la especie y las tendencias que muestran se correlacionan con las de los muestreos de conejos desarrollados sobre el terreno", indica Javier Fernández, del Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC).

Por otro lado, el mapa elaborado por el LIFE Iberconejo muestra la doble cara del conejo de monte: su densidad es alta sobre todo en cuatro grandes zonas españolas asociadas a medios agrícolas (las mesetas sur y norte, y los valles del Ebro y Guadalquivir), mientras que escasea en otros grandes espacios ibéricos, como Sierra Morena, las sierras extremeñas o gran parte de Portugal.

"Elaborar un censo de los conejos a escala peninsular, que implicaría el conteo de cada uno de los ejemplares de la península ibérica, es lógicamente imposible. Pero utilizando un modelo matemático que integra diferentes fuentes de datos podemos conocer la distribución y la abundancia del conejo de monte a una escala sin precedentes, una base sólida para la toma de decisiones informadas", según López.

Ramón Pérez de Ayala, director del proyecto LIFE Iberconejo, apunta que "lo que nos muestran estos resultados es que está en peligro el vital papel ecológico del conejo de monte por su desaparición de los hábitats más naturales y también su función social ligada a una actividad cinegética sostenible".

"Por otro lado, vemos que hay muchos conejos en zonas agrícolas menos propicias para la biodiversidad. Zonas donde producen importantísimos daños a la agricultura y, pese al enorme esfuerzo de las sociedades de caza, en algunas ocasiones estas no alcanzan a controlar sus poblaciones en el grado deseado", añade.