MADRID, 01 (SERVIMEDIA)
María Leire Díez Castro, al que algunos medios señalan como 'fontanera' del PSOE para diversos asuntos, forma parte del patronato de una fundación fundada en 2013 que promueve la "separación de poderes" y la "transparencia" en la gestión de las instituciones públicas.
En concreto, de acuerdo con la información consultada por Servimedia, Díez forma parte del patronato de la Fundación Internacional de Derechos Humanos, una organización que promueve la "separación de poderes" y la "transparencia" en la gestión de las instituciones públicas, además de impulsar los valores de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
La periodista vizcaína Leire Díez Castro se ha convertido en el centro de una controversia política después de ser identificada como presunta 'fontanera' del PSOE. Según informaciones publicadas en mayo de 2025, se le señala por supuestamente intentar obstaculizar investigaciones policiales relacionadas con el partido.
Las revelaciones surgieron tras la filtración de grabaciones donde esta redactora habría buscado información para desacreditar a la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil en investigaciones vinculadas a casos de corrupción que afectan al entorno del presidente Pedro Sánchez.
TRAYECTORIA POLÍTICA
La trayectoria política de Díez Castro incluye su cargo como teniente de alcalde del PSOE en Vega de Pas. Posteriormente, tras la llegada de Sánchez al Gobierno, ocupó posiciones en empresas públicas como Enusa y Correos, nombramientos que han generado cuestionamientos sobre su ascenso dentro del partido.
La investigada mantiene vínculos estrechos con figuras destacadas del partido como Santos Cerdán y Koldo García. Aunque desde Ferraz aseguran que "actúa por libre", Díez Castro continúa participando en actividades del partido y mantiene su militancia en Cantabria. Por su parte, ella defiende que sus acciones formaban parte de "un trabajo de investigación para un libro.
La fundación quedó inscrita el viernes 17 de mayo de 2013 mediante una orden del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, tras su constitución el 12 de enero de ese mismo año en La Pobla de Segur (Lleida).
El patronato está presidido por Jaume Urgell Rubio, con María Claudia Cambi como vicepresidenta y Farid Othman-Bentria Ramos como secretario. Además de Leire Díez, figuran como vocales Víctor Villar, María del Mar Molpeceres, Aaron García y otros seis patronos.
La organización tiene entre sus objetivos principales promover la transparencia en la gestión de las instituciones públicas y defender la separación de poderes, así como impulsar los principios recogidos en la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948.
PENSAMIENTO CRÍTICO Y DEBATE
La fundación establece entre sus fines estimular el pensamiento crítico y favorecer el debate en la sociedad, además de promover una cultura de paz, tolerancia y respeto entre personas, países y culturas.
Entre sus principales líneas de actuación destaca el impulso de la pedagogía democrática y el fomento de la participación ciudadana en todos los ámbitos de la sociedad.
La organización también se marca como objetivo procurar la superación de los desequilibrios políticos, sociales y económicos, así como observar y denunciar cualquier incumplimiento de los derechos humanos.
ÁMBITO INTERNACIONAL
La Fundación Internacional de Derechos Humanos se constituyó como una organización sin ánimo de lucro, con una dotación inicial de 34.511 euros en forma de aportaciones no dinerarias.
Aunque su domicilio estatutario se estableció inicialmente en la calle San Bernardo de Madrid, actualmente tiene su sede en La Haya (Países Bajos), en la calle Oder 20.
La entidad puede desarrollar sus actividades tanto en España como en otros países, ya sea directamente o a través de otras instituciones, pudiendo constituir fundaciones en el extranjero según las legislaciones nacionales.
El patronato tiene la facultad de trasladar la sede dentro de España y crear oficinas en cualquier lugar del territorio español o extranjero, cumpliendo siempre los requisitos legales establecidos.
La fundación se rige por la voluntad de su patronato, sus estatutos y la Ley 50/2002 de Fundaciones, así como por las normas que la desarrollen o modifiquen en el futuro.
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