Air Canada ha registrado un beneficio neto ajustado de 57 millones de dólares canadienses (35,8 millones de euros) en el primer semestre de 2025, lo que supone un 216% menos respecto a los 273 millones de dólares canadienses (171,6 millones de euros) del mismo periodo del año previo, debilitado por las pérdidas de 150 millones dólares canadienses (94 millones de euros) del primer trimestre. En cuanto a la facturación, los ingresos de la aerolínea crecieron apenas un 0,7% en los primeros seis meses, hasta los 10.828 millones de dólares canadienses (6.808 millones de euros). Por su parte, el resultado bruto de explotación (Ebitda) se situó en 1.296 millones de dólares canadienses (815 millones de euros), un 5% menos. Además, el flujo de caja libre se redujo en 493 millones dólares canadienses (310 millones de euros), alcanzando los 1.014 millones de dólares canadienses (637 millones de euros). Por otro lado, la deuda neta se incrementó un 31,8% a 30 de junio, hasta los 4.757 millones de dólares canadienses (2.991 millones de euros). "Nos mantuvimos disciplinados y coherentes en la ejecución de un plan a largo plazo basado en la probada estrategia comercial de Air Canada, al tiempo que navegábamos por la incertidumbre macroeconómica y las tensiones geopolíticas", ha valorado el presidente y CEO de Air Canada, Michael Rousseau, sobre los resultados. De cara a 2025, Air Canada reitera su orientación proporcionada el pasado 8 de mayo por las tensiones comerciales, lo que supuso reducir en 200 millones de dólares canadienses (125,7 millones de euros) su previsión de Ebitda ajustado, concretamente en una horquila de entre 3.200 y 3.600 millones de dólares canadienses (2.263,5 millones de euros). Asimismo, la capacidad operativa de la aerolínea estima un aumento del 1% al 3%, frente al alza del 3% al 5% en la estimación previa.
|