Las autoridades sirias han informado este lunes de la muerte de 27 personas, así como de otras 63 personas heridas, como consecuencia del atentado de este domingo contra la Iglesia de San Elías, en el barrio de Duweila, en el centro de la capital, Damasco, que hacía años que no sufría un ataque contra un templo cristiano. Las autoridades sirias han precisado que un atacante abrió fuego para abrirse paso hasta la iglesia y permitir la entrada de un suicida, que entró en el templo y después se suicidó con un chaleco explosivo. Dos miembros de Estado Islámico han muerto y el líder de una célula del grupo yihadista ha sido detenido junto a cinco de sus colaboradores en varias operaciones de las fuerzas de seguridad, según ha explicado un portavoz del Ministerio del Interior sirio, Nuredín al Baba, citado por la televisión pública Siria TV. Uno de los fallecidos sería "el principal sospechoso de haber facilitado la entrada del suicida en la iglesia" y el otro estaba "preparándose para perpetrar un atentado terrorista en un bario de la capital". Agentes de las fuerzas de seguridad han asaltado varios escondites de Estado Islámico en Damasco y su provincia "en colaboración con el Servicio General de Inteligencia", incluido el utilizado por la célula a la que atribuyen el atentado contra la Iglesia de San Elías del domingo, ha explicado Al Baba. El Ministerio asegura que ha intensificado sus acciones en respuesta al atentado para recopilar información y analizar pruebas en operaciones conjuntas con los servicios secretos, lo que ha permitido estas "operaciones precisas" en los barrios de Harasta y Kafr Batna en las que se han incautado de armamento, munición, explosivos y minas. También han localizado una motocicleta con explosivos preparada para ser detonada. El presidente de transición de Siria, Ahmed al Shara, ha lamentado lo ocurrido y ha enviado sus condolencias a las familias de las víctimas. Al mismo tiempo, ha prometido que perseguirán y colocarán a los responsables de este "crimen atroz" ante la Justicia "para que reciban el castigo que merecen". "Este crimen atroz, que tuvo como blanco a personas inocentes en sus lugares de culto, nos recuerda la importancia de la solidaridad y la unidad --gobierno y pueblo-- para enfrentar todo lo que amenaza nuestra seguridad y la estabilidad de nuestro país", ha expresado Al Shara, según un comunicado de la Presidencia siria. La comunidad internacional se ha apresurado a condenar lo ocurrido y anunciar que colaborarán con el nuevo gobierno de transición en la lucha contra el terrorismo yihadista.
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