
Las supervivientes del Patronato de Protección a la Mujer, institución activa durante la dictadura franquista y encomendada a algunas congregaciones religiosas, han exigido este lunes ante religiosas y religiosos españoles "verdad, justicia y reparación" mientras la Conferencia Española de Religiosos (CONFER) les ha pedido "perdón".
"Verdad, justicia y reparación. Ni olvido ni perdón". Así lo han gritado durante cerca de diez minutos sin descanso las varios cientos de mujeres que han asistido al acto de perdón organizado por la Conferencia Española de Religiosos (CONFER) y celebrado este lunes en la Fundación Pablo VI, en Madrid, mientras mostraban en alto carteles en los que se podía leer "no".
Al acto han asistido la ministra de Igualdad, Ana Redondo, que no ha hecho declaraciones, y la eurodiputada de Podemos y exministra de Igualdad, Irene Montero, que ha pedido al Gobierno y a la Iglesia que entreguen todos sus archivos disponibles para "esclarecer la verdad".
Durante el encuentro, se han podido escuchar relatos de mujeres que pasaron por estos centros encomendados a congregaciones religiosas, en los que denunciaban explotación, maltrato y abusos.
Por parte de la CONFER, su presidente, Jesús Díaz Sariego, ha asegurado que con este acto quieren "romper el silencio" que ha habido sobre "las condiciones de vida injustas, dolorosas" y las "severas restricciones" a las que fueron sometidas estas mujeres.
"Su paso por los centros fue más una cárcel que un medio de promoción humana", ha reconocido, pidiendo perdón por este "capítulo oscuro de la historia".
A Díaz Sariego se han sumado tres religiosas de tres congregaciones, Carmen Ortega, Antonia López y Mati Mena, que han leído la petición de perdón en nombre de las congregaciones que administraron estos centros y se han comprometido a "esclarecer la verdad" y a "impulsar la reflexión" hacia el interior de sus "archivos".
Por su parte, la superviviente e investigadora de lo sucedido en el Patronato de Protección a la Mujer, Consuelo García del Cid, ha enumerado el "sinfín de delitos" que, según ha denunciado, se cometieron en estos centros.
"Explotación laboral, adoctrinamiento religioso extremo, celdas de castigo y aislamiento, ortigas en la vulva si se orinaban en la cama, hasta 150 cruces en el suelo con la lengua, utilización de menores para la mendicidad, bofetadas, palizas", ha señalado. Asimismo, una mujer del público ha gritado "robo de bebés".
Según García del Cid, el Patronato es "la mayor aberración del siglo XXI, prolongada hasta 1985 sin que nadie hiciera nada". "La democracia nos debe diez años de vida y en este caso la responsabilidad es del Gobierno de España, del Ministerio de Justicia", ha zanjado.
Desde la Fundación Pablo VI, su director, Jesús Avezuela, ha indicado que "este no es el lugar para juicios, para procesos judiciales ni enjuiciamientos formales pero sí un espacio para buscar la reconciliación".
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