El metal precioso tocó ayer por vez primera vez un máximo inédito desde 2012
El precio de la plata registraba en la mañana de este viernes un ascenso de un 1,7%, hasta situarse en los 36,26 dólares, marcando así un nuevo máximo inédito desde finales de febrero de 2012. Según los datos del mercado consultados por Europa Press, el metal precioso acumula una revalorización en lo que va de año de un 25%, en tanto que cerró el ejercicio de 2024 en los 28,9 dólares por onza. En paralelo, la onza de oro troy, activo refugio por antonomasia, se ha convertido en uno de los activos estrella de los últimos años: en el presente ejercicio se revaloriza un 28% y en 2024 registró un avance de un 27%. En este contexto, la onza oro firmó el pasado abril su máximo histórico en los 3.500 dólares. De su lado, la analista global de mercados de eToro, Lale Akoner, ya alertaba esta semana que la plata se ha quedado rezagada respecto al oro, pero que podría presentar un potencial alcista asimétrico. "Si bien los bancos centrales no poseen plata, su doble función como metal monetario e insumo industrial crucial, en particular en la energía solar, las baterías y los semiconductores, la hace cada vez más relevante en una economía global en transición hacia la electrificación", ha valorado sobre los posibles causas que servirían de catalizador alcista. Por su parte, el director de investigación Next Generation de Julius Baer, Carsten Menke, ha reconocido este mismo viernes que les "cuesta comprender la repentina subida del jueves en el mercado de la plata". Con todo, ha considerado que los factores técnico, más que los fundamentales, son los que influyen: "Debido a su pequeño tamaño, el mercado de la plata es propenso a una volatilidad excesiva", ha hilvanado. Así, con miras más amplias, ha sostenido que la perspectiva para la plata se mantiene sin cambios: "Seguimos viéndola seguir la estela del oro, con nuestra visión decididamente negativa sobre el dólar estadounidense que respalda nuestra visión positiva", ha vaticinado. "Dicho esto, no consideramos que la narrativa en torno a la condición de refugio seguro del dólar estadounidense y los bonos del Tesoro americanos sea un detonante a corto plazo", ha apuntado para, no obstante, admitir que esto podría convertirse en un factor de impulso a largo plazo, tanto para la plata como para el oro.
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