El Ejército de Israel mata a tres supuestos miembros de Hezbolá en varios ataques en Líbano

El Ejército de Israel ha afirmado este miércoles que ha matado a tres supuestos miembros del partido-milicia chií libanés Hezbolá en ataques lanzados durante la jornada en varios puntos del sur de Líbano, a pesar del alto el fuego de noviembre de 2024.

Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han indicado a través de un breve comunicado publicado en su perfil de la red social X que "por tercera vez hoy" han eliminado "a un terrorista de la organización terrorista Hezbolá" al atacar desde el aire un vehículo en la localidad de Aitarun, ubicada en el distrito de Bint Jbeil.

Horas antes, las FDI confirmaron un ataque con un dron en el municipio de Yatar (también en el distrito de Bint Jbeil) cuyo objetivo había sido un miembro de la Fuerza Radwan, los cuerpos de élite de Hezbolá, sin que el grupo se haya pronunciado al respecto por el momento.

Por la mañana, el Ejército israelí ejecutó otro ataque con un dron contra un vehículo que circulaba cerca de la localidad de Ain Baal e identificó al muerto como Husein Nazia Baryi, "una importante fuente de conocimiento" en la producción de armas que colaboraba con la milicia.

Por parte de las autoridades libanesas, el Centro de Operaciones de Emergencias de Salud Pública afiliado al Ministerio de Sanidad ha confirmado los fallecimientos a través de breves comunicados. También ha indicado que una persona ha resultado herida en el ataque en Yatar.

Anteriormente, el Ejército de Israel ha defendido sus bombardeos argumentando que actúa contra actividades de Hezbolá y que, por ello, no viola el alto el fuego, si bien tanto Beirut como el grupo se han mostrado críticos con estas acciones, igualmente condenadas por Naciones Unidas.

El pacto, alcanzado tras meses de combates al hilo de los ataques del 7 de octubre de 2023, contemplaba que tanto Israel como Hezbolá debían retirar sus efectivos del sur de Líbano. Sin embargo, el Ejército israelí ha mantenido cinco puestos en territorio de su país vecino, algo también criticado por las autoridades libaneses y el grupo chií.